La medida representa un nuevo giro en la batalla que desde hace meses ha desencadenado Amber sobre la gobernanza de Lagardere, liderada por el asediado heredero fundador del grupo, Arnaud Lagardere.

El principal inversor de Vivendi, Bollore, está lanzando el 23,5% del capital social que el conglomerado de medios de comunicación posee en Lagardere detrás de la participación del 20% de Amber, firmando un pacto con la empresa de inversión para exigir cuatro de los nueve puestos del consejo de supervisión de Lagardere: tres para Amber y uno para Vivendi.

Los dos grupos convocarán una nueva junta general "tan pronto como sea posible", dijo un portavoz de Amber. Una fuente cercana al asunto dijo que dicha reunión podría tener lugar en septiembre.

El pacto de cinco años, que incluye un derecho recíproco de compra de las acciones que cada empresa posee en Lagardere en caso de que una de las dos venda, representa un cambio en la posición anterior de Bollore de apoyo total a Arnaud Lagardere.

Ambos han dicho que eran amigos.

Antes de la última asamblea general de Lagardere, celebrada en mayo, Bollore se unió a otros miembros de la élite empresarial francesa para rechazar con éxito el intento de Amber de hacer tambalear el "commandite" de Lagardere, una especie de sociedad limitada que permite a Arnaud Lagardere dirigir el grupo con sólo el 7% de las acciones.

Poco después de la derrota de Amber, Arnault dio la sorpresa de comprar el 25% de la oficina familiar de Arnaud Lagardere, reforzando las finanzas del heredero y dándole mayor influencia sobre el "commandite".

Sin embargo, Amber y Bollore intentarán deshacerse de la sociedad protectora, según una fuente cercana al asunto.

"El 'commandite' es un sistema de gestión aberrante, que es tolerable en los buenos tiempos pero mucho más difícil de tolerar en los malos", dijo una fuente cercana al asunto.

Vivendi insistió en los "malos resultados" de Lagardere para explicar su decisión de ponerse del lado de Amber.

"Todo lo que sabemos es que los resultados son muy, muy malos y necesitamos un cambio", añadió un portavoz de Vivendi.

Lagardere, propietaria del mayor grupo editorial francés, registró una pérdida de 481 millones de euros (433 millones de libras) en el primer semestre y una fuerte caída de los ingresos.

Cuando se les preguntó si el movimiento de Bollore le enfrentaba a Arnault, el hombre más rico de Francia, LVMH y Lagardere declinaron hacer comentarios. También se negaron a comentar el anuncio conjunto de Amber y Vivendi.

(Esta historia corrige el tercer párrafo para mostrar que la participación de Vivendi en Lagardere es del 23,5%, no del 20%, y que la participación de Amber en Lagardere es del 20%, no del 23,5%)