La empresa farmacéutica francesa dijo que adquiriría todas las acciones en circulación de Translate Bio por 38,00 dólares por acción en efectivo, lo que representa un valor total de capital de unos 3.200 millones de dólares.

Los consejos de administración de ambas empresas han aprobado el acuerdo, y el director ejecutivo de Translate Bio y el mayor accionista de la empresa estadounidense lo han respaldado, según informaron Sanofi y Translate Bio en un comunicado conjunto.

Las acciones de Sanofi apenas variaban a 86,73 euros a partir de las 1125 GMT.

"Translate Bio añade una plataforma tecnológica de ARNm y sólidas capacidades a nuestra investigación, avanzando aún más en nuestra capacidad de explorar la promesa de esta tecnología para desarrollar tanto vacunas como terapias de primera clase", dijo el director general de Sanofi, Paul Hudson.

La oferta de Sanofi, de 38 dólares, representa una prima del 30,4% sobre el precio de cierre de las acciones de la empresa que cotiza en Nueva York el 2 de agosto.

En las operaciones previas al mercado estadounidense del martes, las acciones de Translate Bio subieron casi un 30% en línea con la oferta de Sanofi. El lunes, tras el informe de Reuters y antes de que se anunciaran las condiciones financieras, las acciones se dispararon más de un 70% hasta superar los 50 dólares.

INFLUENZA

La oferta de Sanofi por Translate Bio supone el último interés de una gran empresa farmacéutica por la tecnología del ARNm, tras su éxito probado en las vacunas COVID-19 desarrolladas por Pfizer/BioNTech y Moderna.

Según los analistas, el precio tiene sentido desde el punto de vista estratégico, ya que se trata de una apuesta a largo plazo por la tecnología de las vacunas de ARNm más allá de la COVID-19 por parte de uno de los principales fabricantes de vacunas antigripales del mundo.

"Desde COVID, las vacunas de ARNm han tenido un gran impacto en el futuro de la I+D de vacunas y el objetivo más obvio para las vacunas de ARNm de próxima generación es la gripe", escribió Liberum en una nota informativa.

El enfoque del ARN mensajero (ácido ribonucleico), un área de experiencia de Translate Bio, instruye a las células humanas para que fabriquen proteínas específicas que produzcan una respuesta inmunitaria a una determinada enfermedad. Sanofi y Translate Bio unieron sus fuerzas el año pasado para desarrollar una vacuna contra el COVID-19 basada en el ARNm. Esperan los resultados provisionales de su ensayo clínico de fase I/II en el tercer trimestre.

Las dos empresas también están estudiando vacunas de ARNm para varias enfermedades infecciosas y en junio iniciaron un ensayo de fase I para evaluar una posible vacuna de ARNm contra la gripe estacional.

Su rival Moderna inició en julio un ensayo de fase I/II sobre una posible vacuna de ARNm contra la gripe.

AÑO DIFÍCIL

Sanofi espera completar la adquisición en el tercer trimestre de 2021.

El director ejecutivo de Translate Bio y su mayor accionista, Baupost Group, firmaron compromisos vinculantes para apoyar la operación. Sus acciones, combinadas con las que ya posee Sanofi, representan alrededor del 30% del total de acciones en circulación de Translate Bio. El interés de Sanofi llega después de un año difícil para la farmacéutica francesa tras quedar por detrás de sus rivales en la carrera por la vacuna COVID-19, lo que supuso un duro golpe para el director general Hudson, que se incorporó a la empresa hace casi dos años. Sanofi advirtió el año pasado que su vacuna tradicional COVID-19, basada en proteínas y desarrollada con GlaxoSmithKline, mostraba una respuesta inmunitaria insuficiente en personas mayores, lo que retrasó su lanzamiento hasta finales de 2021. Hudson también ha estado bajo una creciente presión para reducir la dependencia de la compañía de su tratamiento estrella para el eczema, Dupixent, con el fin de aumentar las ganancias.

A principios de este año, Sanofi acordó rellenar y envasar millones de dosis de inyecciones fabricadas por Pfizer/BioNTech, Johnson & Johnson y Moderna. Translate Bio, creada en 2016, no ha lanzado ningún medicamento al mercado, pero su producto pulmonar en fase clínica que utiliza su plataforma de ARNm se está probando como tratamiento inhalado para la fibrosis quística en un ensayo clínico de fase I/II.