Destacados políticos alemanes, entre ellos el canciller Olaf Scholz, se reunirán en breve para decidir si obligan o no a los operadores de telecomunicaciones a frenar el uso de equipos fabricados por las chinas Huawei y ZTE, según dijeron personas familiarizadas con el asunto.

Las conversaciones entre Scholz, la ministra del Interior, Nancy Faeser, y el ministro de Transporte, Volker Wissing, tienen como objetivo alcanzar unos requisitos de seguridad más estrictos para la red móvil 5G, dijeron las personas, tras meses de retrasos.

El Ministerio del Interior presentó el año pasado propuestas para introducir cambios en las redes 5G después de que una revisión pusiera de manifiesto la dependencia de Alemania de los dos proveedores chinos.

Berlín ha estado reevaluando su relación con China, un país al que califica tanto de socio como de rival sistémico, pero que es un mercado central para algunas de las empresas más conocidas de Alemania, como Volkswagen y Mercedes-Benz.

El asunto en torno a Huawai y ZTE refleja la toma de conciencia en Berlín de que puede necesitar medidas políticas duras para obligar a las empresas alemanas a reducir su dependencia estratégica de la superpotencia asiática en ascenso. (Reportaje de Andreas Rinke; Redacción de Christoph Steitz; Edición de Leslie Adler)