Con un desplome del 38% ayer, New York Community Bank despertó los viejos demonios de la fragilidad de los bancos regionales estadounidenses. Y con razón: fue el banco que compró el año pasado el banco en quiebra Signature Bank, con el beneplácito de las autoridades. ¿Qué ha ocurrido desde entonces?
New York Community Bancorp. Este nombre no es muy familiar para los inversores internacionales. Se trata de una entidad bancaria regional, de las muchas que hay en Estados Unidos. Sin embargo, su nombre surgió hace un año cuando NYCB se hizo con los activos del quebrado Signature Bank. La operación lo situó en la lista de bancos estadounidenses con más de 100.000 millones de dólares en activos.
Ayer, la cotización del banco se desplomó (-37,7%), tras publicar unas pérdidas trimestrales que el mercado no había previsto en absoluto. El anuncio lastró al resto de bancos regionales, hasta el punto de que el índice KBW, que mide su evolución, cayó un 6%.
NYCB está presidido por Thomas Cangemi, descrito por los especialistas como un veterano del sector, que asumió el cargo a finales de 2020. El banco tiene una larga historia, ya que fue fundado en 1859. Comenzó a crecer realmente a principios de siglo con una importante serie de adquisiciones. A 31 de diciembre, el banco tenía 116.300 millones de dólares en activos totales, 85.800 millones en préstamos y 81.400 millones en depósitos.
Adquisición de Signature Bank
En 2023, el NYCB se hizo con los activos del Signature Bank, que en aquel momento estaba atrapado en la corrida bancaria "bank run" que fue fatal para varios bancos regionales. El banco recuperó 34.000 millones de dólares en depósitos, 13.000 millones en préstamos y 25.000 millones en efectivo del banco en quiebra, catapultándolo al club de los activos de más de 100.000 millones de dólares. Estos bancos están obligados a cumplir unos requisitos de capital y liquidez más estrictos, según prescriben las autoridades reguladoras.
El consejero delegado explicó ayer que su entidad entró en la categoría de los 100.000 millones de dólares más rápido de lo esperado, lo que llevó a reservar una mayor suma para cumplir con los requisitos regulatorios durante el último trimestre de 2023, al tiempo que retuvo más dinero en sus reservas prudenciales para cubrir posibles pérdidas, lo que llevó a una pérdida ajustada de 185.000 millones de dólares. El banco también recortó su dividendo en un 70%.
Sin embargo, los analistas se mostraron cautos ante otros factores. Los bancos regionales, por ejemplo, tienen una gran proporción de préstamos inmobiliarios comerciales. Sin embargo, NYCB ha aumentado sus provisiones sobre préstamos CRE, lo que ha suscitado inquietud sobre esta cartera, afirma Ken Usdin, analista de Jefferies. Está claro que los profesionales no apreciaron la falta de detalles, y a veces de respuestas, de la dirección sobre puntos clave como los ingresos netos por intereses o las perspectivas crediticias.
Moody's entra en liza
Por si fuera poco, el miércoles Moody's puso todas las calificaciones y evaluaciones a largo y corto plazo de New York Community Bancorp y su filial, Flagstar Bank, bajo revisión para rebajarlas.
La agencia, que califica la solidez financiera de los emisores, explicó que su decisión reflejaba las pérdidas inesperadas de NYCB en sus propiedades de oficinas y multifamiliares de Nueva York, la debilidad de sus beneficios, un descenso significativo de su capitalización y su creciente dependencia de la financiación mayorista (es decir, externa).
NEW YORK COMMUNITY BANCORP, INC. 
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