NUEVA YORK, 12 ene (Reuters) -El índice dólar cedía sus ganancias iniciales y las divisas de beta más alto, como el dólar neozelandés y el australiano, presentaban un mejor desempeño el viernes, después de que los precios al productor estadounidenses cayeran inesperadamente en diciembre, elevando las expectativas de una pronta rebaja de tasas de interés en Estados Unidos.

* El Índice de Precios al Productor para la demanda final bajó un 0,1% el mes pasado, tras un descenso del costo de los bienes, mientras que los precios de los servicios se mantuvieron sin cambios, lo que aumenta las posibilidades de una menor inflación en los próximos meses.

* Los futuros de los fondos federales implican una probabilidad del 81% de un recorte de tasas en marzo, frente al 73% del jueves, según la herramienta FedWatch del CME Group.

* "A pesar de que, en general, no se diría que el panorama macroeconómico está gritando que necesitan recortar tan rápido, el mercado parece estar entusiasmado con la perspectiva de reducciones", dijo Steve Englander, de Standard Chartered Bank en Nueva York.

* Los operadores mantuvieron su opinión de que los recortes de tasas en marzo son probables, incluso después de que los datos de inflación de los precios al consumidor del jueves superaran las expectativas de los economistas. El informe de empleo de diciembre de la semana pasada también mostró un fuerte crecimiento de las nóminas no agrícolas, aunque los detalles subyacentes fueron dispares.

* Las divisas neozelandesa y australiana eran las que mejor se comportaban tras los datos del viernes. El kiwi subía un 0,55%, a 0,62660 dólares, y su par australiano ganaba un 0,47%, a 0,67165 dólares.

* La corona noruega también subía en línea con los precios del petróleo después de que aviones de guerra, barcos y submarinos estadounidenses y británicos lanzaran decenas de ataques aéreos en Yemen durante la noche.

* El euro operaba con pocos cambios, a 1,09725 dólares. El índice dólar también cotizaba plano a 102,19 unidades, mientras que la divisa estadounidense perdía un 0,48% frente a su par japonés, a 144,58 yenes.

(Reporte adicional de Harry Robertson en Londres; editado en español por Carlos Serrano y Manuel Farías)