Por Michael S. Derby

(Reuters) - Los estadounidenses se prepararon el mes pasado para unas presiones inflacionarias generalmente más altas en los próximos años y una aceleración del aumento del precio de la vivienda, según un informe publicado el lunes por el Banco de la Reserva Federal de Nueva York.

En su última Encuesta sobre las Expectativas de los Consumidores, el banco señala que los encuestados prevén una inflación del 3,3% para dentro de un año, frente al 3% que anticipaban en marzo, mientras que la inflación a tres años vista se moderará hasta el 2,8%, frente al 2,9% del mes anterior.

La inflación a cinco años vista se situó en el 2,8%, frente al 2,6% de marzo.

El objetivo de inflación de la Reserva Federal es del 2%, y el índice de precios de los gastos de consumo personal, el indicador de inflación preferido del banco central, se situó en marzo en un 2,7% interanual, frente al 2,5% de febrero.

En la encuesta, los encuestados también señalaron que esperaban presiones de precios elevadas dentro de un año en todas las categorías medidas, incluidos alquileres, alimentos, gasolina y gastos médicos.

El aumento previsto de los precios de la vivienda de aquí a un año alcanzó su nivel más alto desde julio de 2022, con un incremento del 3,3%, frente al 3% de los siete meses anteriores.

Aunque el informe reveló que los encuestados esperaban menores ganancias e ingresos en el futuro, también reveló que el gasto futuro aumentaría. También se observó que los hogares estaban más preocupados por su situación financiera personal, aunque se mostraban más optimistas sobre su acceso al crédito.

La encuesta también encontró opiniones contradictorias sobre el mercado laboral, con el nivel más bajo de encuestados diciendo que podrían conseguir un trabajo si lo perdieran desde abril de 2021.

El informe de la Fed de Nueva York llega en un momento en el que la Fed está tratando de encontrar sentido a las presiones de precios inesperadamente rígidas de principios de año. Este panorama está complicando las expectativas de los funcionarios de poder recortar los tipos de interés este año.

El aumento de la trayectoria prevista de los precios a corto y largo plazo dificulta aún más las perspectivas, ya que los funcionarios de la Reserva Federal y muchos analistas del sector privado creen que el rumbo que el público espera que tome la inflación en el futuro influye mucho en su situación actual.

En un informe separado, la Reserva Federal de Cleveland señaló que las expectativas de inflación de los empresarios aumentaron en el segundo trimestre, y que los ejecutivos creen que el índice de precios al consumo subirá un 3,8% en el próximo año, frente al 3,4% previsto en el primer trimestre.

(Reportaje de Michael S. Derby; Editado en español por Juana Casas)