Por Pete Schroeder y Howard Schneider

WASHINGTON/AMELIA ISLAND, EEUU (Reuters) - Dos responsables de la política monetaria de la Reserva Federal dijeron el martes que es prudente que el banco central espere varios meses más para asegurarse que la inflación vuelve realmente a la senda del objetivo del 2% antes de comenzar a recortar las tasas de interés.

"En ausencia de un debilitamiento significativo del mercado laboral, necesito ver varios meses más de buenos datos de inflación antes de sentirme cómodo apoyando una relajación de la orientación de la política monetaria", dijo el gobernador de la Fed, Christopher Waller, en un discurso ante el Instituto Peterson de Economía Internacional en Washington.

La Fed ha mantenido su tasa de interés de referencia entre el 5,25% y el 5,50% desde julio y, tras tres meses de inflación más alta de lo esperado entre enero y marzo, ha acogido con cautela los más recientes indicios de relajación del mercado laboral y avances en la reducción de la inflación hacia su objetivo del 2%.

En comentarios posteriores al discurso, Waller dijo que la Fed desea que la demanda se modere, al tiempo que puso freno a las especulaciones sobre la necesidad de volver a subir las tasas de interés, afirmando que los últimos datos de inflación son "tranquilizadores" y que el tipo de interés oficial del banco central se ha fijado adecuadamente.

"No queremos caer por un precipicio, eso es lo más importante. En estos momentos no vemos nada que nos haga pensar que si nos mantenemos así durante tres o cuatro meses la economía vaya a despeñarse", dijo Waller.

En la actualidad, los operadores esperan que el banco central realice un primer recorte de tasas en septiembre y ven más probabilidades de que haya un segundo recorte en la última reunión del año de la Fed, en diciembre.

En otra comparecencia, el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, adoptó un tono similar, señalando que el banco central debe ser cauto a la hora de aprobar su primer recorte de tasas para asegurarse de no alentar un gasto reprimido entre las empresas y los hogares, y poner a los responsables de política monetaria en una posición en la que la inflación se acelere.

"Nos interesa no empezar a dar tumbos (...) Yo preferiría esperar más para asegurarme de que eso no ocurra", dijo Bostic en declaraciones a periodistas al margen de una conferencia de la Fed de Atlanta, en Florida, y agregó que todavía espera que la inflación baje durante el año y que un único recorte de tasas sería apropiado en el cuarto trimestre.

"No tengo prisa por bajar las tasas", dijo Bostic. "Tenemos que asegurarnos de que, cuando iniciemos ese camino, no haya ambigüedad en que la inflación va a llegar al 2% (...) la existencia de esta exuberancia potencial significa que tenemos que ser muy cautos sobre cuándo hacemos ese primer movimiento, y puede significar que tenga que ocurrir más tarde".

(Reporte de Pete Schroeder y Howard Schneider; editado en español por Javier López de Lérida)