Los dos primeros recortes de los tipos de interés del Banco Central Europeo son una "obviedad", pero una relajación de la política más lenta de lo esperado en Estados Unidos podría retrasar algunas de las medidas del BCE, según declaró el jefe del banco central belga, Pierre Wunsch, al periódico alemán Handelsblatt.

El BCE prácticamente ha prometido un recorte de tipos el 6 de junio, ya que la inflación se encuentra ahora a una distancia asombrosa de su objetivo del 2%, pero ha mantenido abiertas sus opciones para reuniones posteriores, ya que las perspectivas podrían cambiar rápidamente.

"Salvo una sacudida repentina en los próximos meses, la primera mitad de un punto porcentual en los recortes de los tipos de interés es casi una obviedad. Esa es la parte fácil", dijo Wunsch el martes, según Handelsblatt.

"Sin embargo, deberíamos proceder gradualmente y no demasiado rápido. Deberíamos abstenernos de comprometernos a un segundo recorte de tipos ya en julio".

Al preguntársele por qué no abogaba por una medida en julio, Wunsch dijo que un segundo paso consecutivo podría señalar que el BCE estaba iniciando una serie de recortes de tipos, aumentando las expectativas del mercado en un momento en el que los responsables políticos deberían mantener la cautela, ya que no se sabe con certeza dónde acabarán los tipos.

Wunsch también dijo que un retraso en los recortes de tipos por parte de la Reserva Federal de EE.UU. podría ralentizar el ritmo de recortes de tipos del BCE, pero que era poco probable que esto hiciera descarrilar también la desinflación de la zona euro.

Actualmente se considera que la Reserva Federal se mantendrá a la espera hasta noviembre, y los mercados esperan el primer recorte pocos días después de las elecciones estadounidenses, ya que la inflación en Estados Unidos está resultando más difícil de lo que se pensaba.

"Unos tipos de interés más altos en EE.UU. podrían llevar a un dólar fuerte y, por tanto, a una inflación importada, es decir, a precios más altos aquí", dijo Wunsch.

"Eso podría llevarnos a reducir los tipos a un ritmo más lento. Sin embargo, es poco probable que nos saque de la senda de la inflación hacia el 2%." (Reportaje de Balazs Koranyi; Edición de Susan Fenton)