10 may (Reuters) - El presidente ruso, Vladímir Putin, propuso el viernes la renovación en el cargo del primer ministro, Mijaíl Mishustin, un tecnócrata que le ha ayudado en la guerra de Ucrania y en los desafíos económicos provocados por las sanciones occidentales por la invasión de Moscú.

La aprobación por la Duma del discreto Mishustin es casi segura, ya que prácticamente no hay oposición en el Parlamento, que ha apoyado a Putin en todas sus decisiones, incluida la invasión en febrero de 2022 del país vecino.

Tal y como dicta la ley, el Gobierno dimitió justo antes de que Putin, líder supremo de Rusia durante casi un cuarto de siglo, jurara el martes su cargo para otro mandato de seis años tras ganar en una aplastante reelección en marzo.

No hay indicios de que Putin planee una gran remodelación del Gobierno, que incluye al veterano Serguéi Shoigu, a cargo de la defensa de Rusia desde 2012, y al ministro de Asuntos Exteriores Serguéi Lavrov, a cargo de la diplomacia rusa desde hace dos décadas.

Mantener intacto su Gobierno enviaría un mensaje de estabilidad y de satisfacción de Putin por los progresos de su equipo en el interior y en el exterior, según los analistas.

"El presidente Vladímir Vladímirovich Putin presentó a la Duma Estatal una propuesta sobre la candidatura de Mijaíl Vladímirovich Mishustin al puesto de presidente del Gobierno", dijo el presidente de la Duma, Viacheslav Volodin, en la aplicación de mensajería Telegram.

"Hoy, los diputados tomarán una decisión responsable en nombre de sus electores sobre esta cuestión", dijo Volodin.

UN BURÓCRATA DE PERFIL BAJO MANTIENE LA ECONOMÍA A FLOTE

Se dice que Mishustin, burócrata de carrera, no tenía ambiciones políticas antes de que Putin le nombrara primer ministro en 2020. Sin experiencia en los servicios de seguridad, no forma parte de la facción de veteranos de los servicios de inteligencia cercanos a Putin conocida como "siloviki" (hombres fuertes).

Sin embargo, aunque ha mantenido un perfil bajo, a Mishustin se le ha atribuido el mérito de mantener a flote la economía rusa después de que los aliados de Kiev golpearan al país con sanciones que han complicado enormemente la financiación de las empresas rusas y reducido los mercados para los vastos recursos naturales del país.

Antes de convertirse en primer ministro, Mishustin dirigió durante una década el servicio tributario federal, donde se le atribuyó el mérito de haber duplicado con creces los ingresos.

En octubre, cuando Rusia se enfrentaba a un aumento de las sanciones, Mishustin dijo que Moscú simplificaría los trámites para que ciudadanos y empresas de 25 países "amigos" --entre ellos China, India, Brasil, Arabia Saudí, Turquía, Kazajistán y Bielorrusia-- invirtieran en Rusia.

En un momento peligroso para Putin, en junio del año pasado, Mishustin dijo que Rusia debía unirse en torno al presidente, ya que el frustrado motín de mercenarios que luchaban en Ucrania había supuesto "un desafío para su estabilidad".

(Reporte de Reuters; Redacción de Lidia Kelly; Edición de Jacqueline Wong y William Mallard; editado en español por Tomás Cobos)