El vuelo MH370, un Boeing 777 con 227 pasajeros y 12 tripulantes, desapareció en ruta de Kuala Lumpur a Pekín el 8 de marzo de 2014.

Los investigadores malasios no descartaron inicialmente la posibilidad de que el avión se hubiera desviado deliberadamente de su ruta, y restos, algunos confirmados y otros que se cree que pertenecen al aparato, han aparecido en la costa de África y en islas del océano Índico.

El ministro de Transporte malasio, Anthony Loke, dijo que la empresa estadounidense de exploración de los fondos marinos Ocean Infinity había sido invitada a discutir su última propuesta de búsqueda tras dos intentos previos fallidos.

"El Gobierno malasio está comprometido con la búsqueda (del MH370) y la búsqueda debe continuar", dijo Loke en un acto conmemorativo el domingo.

Malasia contrató a Ocean Infinity en 2018 para buscar en el sur del océano Índico, ofreciendo pagar hasta 70 millones de dólares si encontraba el avión.

Malasia, China y Australia habían puesto fin antes, en enero de 2017, a una infructuosa búsqueda submarina de dos años y 200 millones de dólares australianos (130,46 millones de dólares estadounidenses).

Loke dijo que Malasia hablaría con Australia sobre la cooperación para reanudar la búsqueda una vez que la propuesta de Ocean Infinity sea aprobada por el gabinete de Malasia.

V.P.R. Nathan, cuya esposa Anne Daisy estaba a bordo del vuelo, dijo que la propuesta de Ocean Infinity, que incluye la opción "sin hallazgo no hay pago", era bienvenida.

"Queremos que la búsqueda continúe, pero también tenemos que ser realistas. No podemos esperar que el gobierno gaste miles de millones (en la búsqueda)", dijo Nathan.

Jiang Hui, un ciudadano chino cuya madre era pasajera del MH370, pidió a Malasia que facilite a sus familiares la información más reciente que reciba.

"Mientras haya comunicación, podremos evitar malentendidos", dijo Jiang, que se encuentra entre los familiares que presentaron una demanda en China exigiendo una indemnización por la desaparición del avión.

Un tribunal de Pekín inició las audiencias de indemnización en noviembre.

En el vuelo viajaban más de 150 pasajeros chinos. Los familiares exigen indemnizaciones a Malaysia Airlines, Boeing, el fabricante de motores de avión Rolls-Royce y el grupo asegurador Allianz, entre otros.