Las empresas de servicios públicos japonesas están "muy preocupadas" por la escalada de las tensiones en Oriente Próximo, ya que cualquier interrupción del suministro en la región tendrá un gran impacto en el abastecimiento de combustible y en los precios, declaró el viernes el jefe de un grupo de la industria de la energía eléctrica.

Israel lanzó el viernes un ataque contra suelo iraní, según las fuentes, en el último intercambio de golpes de efecto entre los dos países, cuya guerra en la sombra durante décadas ha salido a la luz y amenaza con arrastrar a la región a un conflicto más profundo.

Los precios del petróleo subieron el viernes ante las noticias de que Israel había atacado Irán, que agitaron los mercados y desataron la preocupación de que pudiera interrumpirse el suministro de crudo de Oriente Próximo.

"Estamos muy preocupados", declaró en una conferencia de prensa Kingo Hayashi, presidente de la federación japonesa de empresas de energía eléctrica.

"Si se bloqueara el Estrecho de Ormuz, afectaría significativamente a nuestro aprovisionamiento de combustible tanto en volumen como en precio", dijo Hayashi, también presidente de Chubu Electric Power.

El Estrecho de Ormuz discurre entre el Golfo Pérsico y el Golfo de Omán y constituye una ruta clave para el transporte marítimo.

Japón depende en gran medida del crudo de Oriente Medio, ya que importa más del 95% de su petróleo de la región, pero el país, pobre en recursos, ha reducido significativamente las centrales eléctricas de petróleo, aunque sigue dependiendo en gran medida de la generación de electricidad a partir de carbón y gas.

El aumento de los precios del petróleo provocará probablemente una subida de los precios del gas y de otras energías, afirmó Hayashi, quien añadió que la adquisición por parte de Japón de gas natural licuado (GNL) de Qatar también podría verse afectada en caso de interrupción del Estrecho de Ormuz.

Tohoku Electric Power, que compra GNL a Qatar, también expresó su temor por el aumento de las tensiones en Oriente Medio.

"Estamos profundamente preocupados por el aumento de los costes del combustible y la imposibilidad de adquirirlo cuando queramos, lo que podría interrumpir el suministro estable de electricidad", declaró a la prensa el presidente de Tohoku Electric, Kojiro Higuchi.

"También nos preocupa que la subida de los precios del petróleo pueda disparar los precios del carbón", añadió.

Si se interrumpiera el suministro de GNL procedente de Oriente Medio, Tohoku Electric tendrá que plantearse comprar GNL al contado y ejercer su opción de aumentar el volumen de otros proveedores de GNL con los que tiene contratos a largo plazo, dijo.

"Si aun así no es suficiente, nos pasaremos al carbón", dijo. (Reportaje de Yuka Obayashi en Tokio. Edición de Jacqueline Wong y Jane Merriman)