Sus decisiones de dejar sin cambios la calificación de Francia distaban mucho de estar aseguradas después de que el Ministerio de Finanzas tuviera que revisar este mes sus objetivos fiscales para los próximos años tras incumplir los del año pasado debido a unos ingresos fiscales más débiles de lo esperado.
"Esta decisión debería animarnos a redoblar nuestra determinación para restablecer nuestras finanzas públicas y cumplir el objetivo del presidente de (reducir) el déficit a menos del 3% (del PIB) en 2027", declaró Le Maire en un comunicado.