El oro al contado se mantenía en los 2.358,42 dólares por onza hacia las 0229 GMT. Los precios alcanzaron máximos de dos semanas en la sesión anterior.
Los futuros del oro estadounidense cayeron un 0,4% hasta los 2.364,60 dólares.
El martes se publicarán los datos del índice de precios al productor (IPP) estadounidense, seguidos por los del índice de precios al consumo (IPC) el miércoles.
La mediana de las previsiones es que los precios al consumo suban un 0,3% en el mes, frente al 0,4% de marzo, lo que situaría la tasa anual en el 3,6%, según un sondeo de Reuters.
"Sospecho que la inflación será más rígida de lo que la gente quiere ver, por lo que tenemos que tener en cuenta algunos baches en el camino, pero eso no significa necesariamente que la inflación vaya a subir", dijo el analista senior de City Index, Matt Simpson.
"Simplemente no se desinflará tan rápido como esperan las palomas. Y eso podría dar lugar a un comercio agitado para los precios del oro en torno a estos máximos, en un momento del año normalmente asociado con rendimientos negativos para los precios del oro."
Tras un informe de nóminas de EE.UU. de abril más suave de lo esperado y un débil informe de empleo de la semana pasada, han aumentado las expectativas de reducciones de tipos este año.
Los operadores esperan que el banco central estadounidense inicie su ciclo de relajación en septiembre. Unos tipos de interés más bajos reducen el coste de oportunidad de mantener oro.
Pero los comentarios de los funcionarios de la Fed la semana pasada fueron variados, ya que los oradores debatieron si los tipos de interés eran lo suficientemente altos. Un salto en las expectativas de inflación de los consumidores, revelado en una encuesta el viernes, podría complicar aún más la conversación.
La plata al contado cayó un 0,1% a 28,12 $ la onza, el platino bajó un 0,2% a 991,87 $ y el paladio perdió un 0,5% a 973,21 $.
