El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU necesita 400 millones de dólares para alimentar a millones de personas en el sur de África tras una sequía que ha sumido en el hambre a parte de la región, según informó el programa el miércoles.

El PMA dijo a Reuters que necesitaba financiación urgente durante seis meses para apoyar el alivio de la sequía en Zimbabue, Zambia y Malawi, después de que las cosechas cayeran como resultado de una sequía inducida por El Niño que ha afectado a 4,8 millones de personas.

El Niño, un fenómeno meteorológico que altera los patrones de los vientos y calienta la temperatura en algunas partes del océano Pacífico, puede afectar al rendimiento de las cosechas al reducir los niveles de lluvia.

"Es justo decir que ésta será probablemente la mayor respuesta a El Niño que hayamos hecho nunca en el sur de África", declaró a Reuters Tomson Phiri, portavoz del PMA.

Alrededor del 70% de la población del sur de África que depende de la agricultura de secano vio sus cosechas "aniquiladas" por la falta de lluvias, añadió Phiri.

Phiri dijo que el PMA, que también proporciona pagos en efectivo a las comunidades hambrientas, está intentando comprar grano en mercados exteriores.

En agosto del año pasado, el PMA destinó 14 millones de dólares a ayudar a las comunidades de Lesotho, Madagascar, Mozambique y Zimbabue, dijo Phiri.

Las sucesivas sequías en la región han provocado la disminución de las reservas de grano, obligando a los países afectados como Zimbabue a obtener grano en el extranjero.

Un grupo de molineros privados de Zimbabue tiene previsto importar 1,4 millones de toneladas métricas de maíz de Brasil, Argentina y otros países para ayudar a paliar el hambre.

En Zimbabue, el ministro de Finanzas, Mthuli Ncube, declaró que el gobierno recibirá de la Agencia del Clima de la Unión Africana un seguro de 32 millones de dólares para paliar la sequía.

Ncube dijo que parte de la financiación se utilizará como transferencias de efectivo para las comunidades vulnerables y que otra parte se destinará a las agencias humanitarias para que presten apoyo en la adquisición de alimentos.