Los precios del petróleo cayeron en los primeros intercambios asiáticos del martes, con los inversores anticipando que el aumento de la inflación y de los tipos de interés en EE.UU. deprimirá la demanda industrial y de consumo.

Los futuros del crudo Brent bajaron 12 centavos, o un 0,1%, hasta los 83,34 dólares el barril a las 0041 GMT. El crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) cedía 8 centavos, o un 0,1%, a 79,72 dólares el barril.

Ambas referencias cayeron menos de un 1% el lunes, ya que los funcionarios de la Reserva Federal de EE.UU. dijeron que estaban esperando más señales de desaceleración de la inflación antes de considerar recortes en los tipos de interés.

"El temor a una demanda más débil provocó ventas a medida que se alejaba la perspectiva de un recorte de los tipos de la Fed", declaró el analista Toshitaka Tazawa de Fujitomi Securities.

El vicepresidente de la Fed, Philip Jefferson, dijo el lunes que era demasiado pronto para saber si la desaceleración de la inflación es "duradera", mientras que el vicepresidente Michael Barr afirmó que la política restrictiva necesita más tiempo. El presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, afirmó que el banco central "tardará un tiempo" en confiar en que la ralentización del crecimiento de los precios sea sostenible.

Unos tipos de interés más bajos reducen los costes de los préstamos, liberando fondos que podrían impulsar el crecimiento económico y la demanda de petróleo.

Los mercados mundiales de crudo físico se están debilitando debido a la escasa demanda de las refinerías y a la abundante oferta, según dijeron a Reuters operadores y analistas, lo que podría suponer una mayor debilidad para los futuros del crudo de referencia.

Por otra parte, el mercado pareció poco afectado por la incertidumbre política en dos importantes países productores de petróleo.

El presidente iraní, Ebrahim Raisi, de línea dura y posible sucesor del líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei, murió en un accidente de helicóptero, mientras que el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed Bin Salman, aplazó un viaje a Japón por la salud de su padre, el rey.

"La muerte del presidente iraní y el problema de salud del rey saudí no parecen afectar mucho al mercado, ya que no está claro si tendrán un impacto inmediato en la política energética", afirmó Tazawa, de Fujitomi.

Los inversores se están centrando en el suministro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus afiliados, conocidos en conjunto como OPEP+. Está previsto que se reúnan el 1 de junio para fijar la política de producción, incluida la decisión de prorrogar los recortes voluntarios de 2,2 millones de barriles diarios de algunos miembros.

La OPEP+ podría prorrogar algunos recortes voluntarios de la producción si la demanda no repunta, según dijeron anteriormente a Reuters personas con conocimiento del asunto. (Reportaje de Yuka Obayashi; Edición de Christopher Cushing)