La empresa ACWA POWER ha puesto la primera piedra del proyecto eólico Nukus, de 100 MW, en una ceremonia oficial a la que asistieron S.E. Shavket Mirziyoyev, Presidente de la República de Uzbekistán; S.E. Yousef Saleh Algahrah Al-Otaibi, Embajador de Arabia Saudí en la República de Uzbekistán, el Sr. Mohammad Abunayyan, Presidente de ACWA Power, y altos funcionarios del Gobierno uzbeko. La colocación de la primera piedra se produce menos de dos meses después de la firma de los acuerdos vinculantes del proyecto con el gobierno de la República de Uzbekistán y JSC National Electric Grid (NEGU), la empresa adjudicataria. Con una inversión total estimada de 108 millones de dólares, el proyecto se encuentra en el distrito de Karatau, en la región de Karakalpakstan, en el noroeste del país. Se espera que alcance el cierre financiero en el tercer trimestre de 2022. El gobierno uzbeko tiene planes para diversificar la combinación de energías del país y se propone alcanzar 8 GW de capacidad solar y eólica para 2026. El proyecto eólico de Nukus supone la primera licitación abierta y competitiva de la república en el sector de la energía eólica. ACWA Power ganó la licitación tras proponer una tarifa de 2,5695 céntimos de dólar/kwh, que fue la más baja en un proceso de licitación en el que participaron otros 11 licitadores. El proyecto constará de aerogeneradores con un diseño y unas características técnicas avanzadas. Cada aerogenerador tendrá una capacidad de generar más de 5 MW de electricidad, lo que demuestra la capacidad de ACWA Power de seguir optimizando el diseño junto con los fabricantes para una innovación continua. Además, ACWA Power se esforzará por dar a las empresas locales de asesoramiento, fabricación y mano de obra la oportunidad de participar en el proyecto. El proyecto eólico de Nukus es la cuarta instalación de ACWA Power en la República de Uzbekistán. La cartera de la empresa en el país incluye también una planta de turbinas de gas de ciclo combinado y dos proyectos eólicos. Cuando este proyecto entre en funcionamiento comercial en 2024, contribuirá en un 1,25% a los objetivos globales de energía renovable de Uzbekistán. Además, se espera que la instalación suministre energía a 120.000 hogares uzbekos y compense 200.000 toneladas de emisiones de carbono al año.