Las aerolíneas que luchan contra las crecientes presiones de costes y los retos operativos esperan que la mejora de la demanda de viajes internacionales ayude a cimentar su camino hacia la rentabilidad.

El código compartido permite a una aerolínea vender asientos en un vuelo operado por su socio, de modo que pueda llevar a los pasajeros a destinos que no sirve.

En virtud del acuerdo ampliado, los pasajeros que busquen vuelos entre Estados Unidos y Canadá en las páginas web y aplicaciones de United o Air Canada encontrarán más opciones de vuelo y más acceso al inventario de asientos de cada aerolínea.

Las compañías aéreas prevén que los clientes podrán conectar con 46 destinos transfronterizos de código compartido en 2022, pero se excluirán ciertos mercados y territorios de ocio estadounidenses.

"A medida que los viajes internacionales continúan recuperándose, esta asociación ampliada proporcionará una experiencia mejorada para todos los viajes transfronterizos", dijo Patrick Quayle, vicepresidente senior de Planificación de Red Global y Alianzas de United.

El miércoles, United Airlines registró un beneficio trimestral inferior al esperado, ya que el auge de la demanda de viajes no logró compensar el aumento de los costes operativos.