El plan de flota a 10 años de la aerolínea, desvelado el año pasado, muestra que pretende expandirse en casi 600 aviones. En diciembre anunció un acuerdo con Airbus para 355 pedidos en firme y opcionales de aviones A321 de fuselaje estrecho y A350 de fuselaje ancho.
"Estamos negociando tanto con Airbus como con Boeing los 235 aviones restantes", declaró Bolat en un acto celebrado con Airbus y Rolls-Royce en Estambul.
Turkish Airlines "siempre ha seguido una política equilibrada entre Airbus y Boeing", afirmó, añadiendo que estaba esperando a que terminaran los problemas a los que se enfrentaba Boeing, por lo que no tenía prisa por tomar una decisión.
En enero, un reventón en pleno vuelo de un panel de la cabina llevó a Boeing a ralentizar la producción de su avión más vendido.
Bolat también dijo que Rolls-Royce estaba explorando la posibilidad de establecer capacidades de mantenimiento, reparación y revisión en Turquía, así como una mayor contratación de la cadena de suministro.
El acto se celebró para desvelar un programa estratégico que Turkish Airlines creó junto con Airbus y empresas aeroespaciales de Turquía para desarrollar la industria aeroespacial turca.