La revelación se produce meses después de que Alphabet redujera su participación en la empresa en casi un 90%. Tenía alrededor de 612.214 acciones de Robinhood tras esa venta.
Al parecer, Alphabet había invertido en Robinhood cuando ésta era una startup que no cotizaba en bolsa y que había captado el entusiasmo de los operadores minoristas con sus operaciones sin comisiones y su interfaz fácil de usar.
Cuando las condiciones económicas se volvieron turbias debido a las subidas de tipos de la Reserva Federal el año pasado, la aplicación perdió parte de su encanto, ya que su base de clientes se mantuvo al margen.
En su informe de resultados del tercer trimestre de la semana pasada, Robinhood
no llegó a
las estimaciones de ingresos de Wall Street, lastradas por una ralentización del comercio. (Reportaje de Niket Nishant en Bengaluru; Edición de Pooja Desai)