Todas las importaciones de oro brasileño realizadas por Alemania y el 71% por Italia proceden de zonas de la Amazonia en las que prolifera la minería ilegal, afirmó el martes un think thank, que pide un mayor escrutinio europeo.

Todas las 1,3 toneladas (2.866 libras) de oro que Alemania importó de Brasil en 2023 procedían del estado de Amazonas, según mostró un estudio realizado por el Instituto Escolhas, con sede en Sao Paulo, a partir de datos gubernamentales.

Italia importó 356 kg (784,85 lb) de oro brasileño el año pasado, incluidos 254 kg de los estados de Pará y Sao Paulo, según el informe titulado El oro arriesgado de Europa.

La minería de oro salvaje, conocida como garimpo en portugués, se ha disparado en Amazonas y Pará en los últimos años desde que el ex presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro relajó los controles medioambientales y fomentó el desarrollo en la selva amazónica, lo que llevó a un aumento de la deforestación.

El estado de Sao Paulo no produce oro, pero es el principal centro de venta y exportación del metal precioso, especialmente de origen legal poco claro.

La Unión Europea tiene normas estrictas para frenar la venta de minerales de origen dudoso o ilícito, pero el proceso de diligencia debida tiene muchos puntos ciegos, dijo en una entrevista Larissa Rodrigues, directora de investigación del Instituto Escolhas.

"No puede decir que tiene una política de compras responsable. ... Las empresas europeas que compran el oro no tienen ni idea de dónde se extrajo y quién lo vendió a los comerciantes para su exportación".

Alrededor del 94% del oro brasileño importado por Alemania e Italia, los principales compradores de la UE, tiene un origen dudoso, ya que llega a través de una cadena de intermediarios desde cientos de yacimientos auríferos de la Amazonia, señaló Rodrigues.

Más de la mitad de las 68 toneladas de oro exportadas por Brasil el año pasado tienen orígenes sospechosos que no pueden rastrearse, a pesar de las medidas del gobierno actual para reprimir la venta ilegal de oro, según el Instituto Escolhas, una organización sin ánimo de lucro.

Canadá es el principal comprador de oro brasileño, que es exportado por empresas procedentes de minas legalmente autorizadas, al igual que ocurre con el tercer mayor importador, el Reino Unido, según el think tank.

Sin embargo, las importaciones de oro brasileño por parte de Suiza, el segundo mayor comprador, incluyen lingotes procedentes de explotaciones mineras salvajes, dijo Rodrigues. Gran parte de eso acaba en la UE, que obtiene el 70% de su oro de los suizos.