AMUNDI 
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La gestora de activos Amundi dijo el miércoles que ya ha superado sus objetivos estratégicos para 2022, al tiempo que informó de un fuerte aumento de los resultados anuales el año pasado gracias al crecimiento en el sector minorista y su negocio asiático.
Amundi, que pertenece en un 70% a Crédit Agricole, registró un beneficio neto ajustado de 328 millones de euros en el periodo octubre-diciembre, lo que supone un aumento del 14% respecto al año anterior.
En el año 2021, el beneficio neto ajustado del grupo aumentó un 37%, hasta los 1.315 millones de euros.
"Tenemos un resultado que significa que ya hemos cumplido y superado nuestro objetivo de ganancias en el plan estratégico 2018-2022", dijo a la prensa la consejera delegada Valerie Baudson, quien añadió que se anunciará un nuevo plan en una fecha que se comunicará próximamente.
Amundi dijo que el negocio de distribución de terceros había logrado un fuerte crecimiento al por menor y que también se había beneficiado de su expansión en Asia, con sus empresas conjuntas en la India y China en particular.
La empresa dijo que sus entradas netas fueron de 65.600 millones de euros en el cuarto trimestre, mientras que sus activos gestionados aumentaron un 10,8% interanual, hasta los 2.064 millones de euros a finales de diciembre, con la integración de los activos gestionados por Lyxor.
La integración de esta antigua filial de Société Générale, que fue comprada por Amundi el año pasado para reforzar su posición en el mercado de los fondos cotizados (ETF) en particular, está prevista para el segundo y tercer trimestre.
Amundi propuso pagar un dividendo de 4,10 euros por acción, un 41% más que en 2020.
La gestora también anunció que había superado sus objetivos ESG para 2018-2021. En particular, se comprometió en un plan anunciado en diciembre a indexar la remuneración de sus principales ejecutivos a los objetivos ASG.
Los gestores de activos se enfrentan a una presión cada vez mayor para garantizar que sus actividades se ajusten a las ambiciones climáticas de Europa. Sin embargo, la evaluación de la responsabilidad social de las empresas sigue siendo extremadamente difícil para los inversores debido a la gran variedad de ámbitos, definiciones y objetivos.
