Los fiscales de Milán emitieron un comunicado en el que decían que habían llegado a un acuerdo con una empresa multinacional de streaming de vídeo a la carta por un periodo que abarcaba de octubre de 2015 a 2019 y le pedían que pagara 55,8 millones de euros (59,1 millones de dólares).

Dieron la cifra del acuerdo sin nombrar específicamente a la empresa implicada, pero tres fuentes con conocimiento del asunto confirmaron que se trataba de Netflix.

Un portavoz de Netflix dijo que la empresa se alegraba de que el asunto hubiera finalizado.

"Hemos mantenido un diálogo y una cooperación constantes con las autoridades italianas y seguimos creyendo que hemos actuado en total conformidad con las normas italianas e internacionales", dijo el portavoz.

Los fiscales habían abierto una investigación sobre una posible evasión fiscal hace tres años.

Afirmaban que Netflix debería haber pagado impuestos en Italia porque se basaba en la infraestructura digital para transmitir contenidos a 2 millones de usuarios en el país.

Como telón de fondo del acuerdo de pago, Netflix ha abierto ahora una oficina en Italia, estableciendo una base en Roma y contratando a más de 40 empleados.

La investigación de los fiscales de Milán, que sostienen que los cables y servidores informáticos utilizados por Netflix equivalen a una presencia física en Italia, se ha desencadenado a raíz de los controles realizados por la policía fiscal italiana.

En el pasado, los fiscales de Milán han investigado a otros gigantes tecnológicos estadounidenses, como Apple, Amazon y Facebook, por eludir impuestos, lo que ha permitido a Italia obtener varios miles de millones de euros en multas y pagos de impuestos.

(1 dólar = 0,9446 euros)