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El índice paneuropeo STOXX 600 cedió un 0,2%, un día después de caer por la preocupación de un enfriamiento de la economía mundial tras los decepcionantes datos de actividad manufacturera de la zona euro.
El martes, la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, llegó a Taiwán, país reclamado por China, a bordo de un avión militar estadounidense, la primera visita de este tipo en 25 años y que corre el riesgo de llevar las relaciones entre Washington y Pekín a un nuevo mínimo.
"Tras el mejor mes del STOXX 600 en julio, la renta variable europea está devolviendo parte de esas ganancias para iniciar agosto, lo que sugiere que el repunte fue ligeramente exagerado", dijo Victoria Scholar, jefa de inversiones de Interactive Investor.
"Aunque la visita de Pelosi podría crear una tensión más profunda entre Pekín y Washington, es poco probable que desemboque en un conflicto militar real".
No obstante, los mercados mundiales se mostraron nerviosos, con las acciones estadounidenses luchando por las ganancias y el dólar y el oro subiendo.
"El hecho de que el momento coincida con un renovado nerviosismo sobre una recesión tras los indicadores PMI bajistas de ayer a nivel mundial, los inversores están nerviosos por la posibilidad de que China tome represalias con nuevas restricciones comerciales a las importaciones estadounidenses", dijo Raffi Boyadjian, analista principal de inversiones de la correduría XM.
En Europa, las mineras fueron uno de los mayores lastres, con una caída del 1,4% en medio de un descenso de los precios de las materias primas, ya que los operadores se precipitaron hacia activos más seguros.
Los valores de semiconductores como ASML Holding, ASM International y BE Semiconductor cayeron entre un 1,2% y un 2,2%.
Mientras tanto, Moody's Investors Service señaló un mayor riesgo de estanflación en los países de la Unión Europea.
Entre los índices europeos, el FTSE 100 del Reino Unido fue el que menos cayó entre sus homólogos europeos, gracias a los grandes beneficios del gigante petrolero BP, cuyas acciones subieron un 2,8%.
Maersk ganó un 2,1% tras elevar por segunda vez sus previsiones de beneficios para 2022 después de batir sus ingresos trimestrales, ya que las congestionadas cadenas de suministro impulsan los fletes.
Ferrari ganó un 1,1% después de superar las previsiones de beneficios y de informar de un récord de pedidos en el segundo trimestre, lo que llevó al fabricante de coches deportivos de lujo a elevar también sus objetivos para todo el año.
Se espera que los beneficios del segundo trimestre de las empresas que forman parte del STOXX 600 aumenten un 28,1% respecto al año anterior, según Refinitiv, ligeramente por encima de las estimaciones del 23,1% de la semana pasada. (Información de Bansari Mayur Kamdar y Anisha Sircar en Bengaluru; edición de Shounak Dasgupta y Maju Samuel)
