La Autoridad de Regulación Prudencial del Banco de Inglaterra ha publicado un documento de debate en el que describe sus propuestas para la elaboración de políticas ahora que Gran Bretaña ha abandonado la Unión Europea.

"El paso a un estilo de regulación más británico, con normas técnicas elaboradas por los reguladores en lugar de establecidas en la ley, nos permitirá ofrecer normas prudenciales sólidas de una manera que sea proporcionada, apoye la competitividad y se adapte al mercado del Reino Unido", dijo el subgobernador del BoE, Sam Woods.