PARÍS (dpa-AFX) - El ritmo de adopción de los coches eléctricos dependerá de su asequibilidad y de la disponibilidad de puntos de recarga, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE). Las crecientes exportaciones de coches eléctricos de los fabricantes chinos, que representarán más de la mitad de todas las ventas en 2023, podrían aumentar aún más la presión sobre los precios de los automóviles, anunció el martes en París la AIE. Las empresas chinas con instalaciones de producción en el extranjero han logrado fuertes ventas en los mercados de ultramar con modelos más asequibles lanzados en 2022 y 2023. Esto demuestra que la producción de vehículos eléctricos se localiza en regiones diferentes a las de la industria automovilística tradicional.
En China, más del 60% de los coches eléctricos vendidos en 2023 eran más baratos de comprar que un modelo de combustión correspondiente, informó la AIE. En Europa y EE.UU., en cambio, los precios de compra de los coches con motor de combustión seguirán siendo más baratos de media, aunque se espera que la creciente competencia y las mejores tecnologías de baterías hagan bajar los precios en los próximos años.
Las redes de recarga deben multiplicarse por seis de aquí a 2035
La AIE subraya que, para que el crecimiento continúe, la disponibilidad de puntos de recarga públicos debe seguir el ritmo de las ventas de vehículos eléctricos. El número de puntos de recarga públicos instalados en todo el mundo aumentará un 40% interanual en 2023. Según el análisis de la agencia de la energía, las redes de recarga deberán multiplicarse por seis de aquí a 2035 para alcanzar la penetración de vehículos eléctricos que persiguen los gobiernos.
El año pasado, las ventas mundiales de coches eléctricos aumentaron un 35%, hasta casi 14 millones, según cifras de la AIE. Para 2024 se esperan ventas de unos 17 millones de coches eléctricos. "El impulso continuado de los coches eléctricos se desprende claramente de nuestros datos, aunque sea más fuerte en algunos mercados que en otros", afirmó Fatih Birol, director de la AIE. "La ola de inversión en la fabricación de baterías sugiere que la cadena de suministro de vehículos eléctricos está avanzando para cumplir con los ambiciosos planes de expansión de los fabricantes de automóviles", dijo Birol. "Este cambio tendrá un impacto significativo tanto en la industria del automóvil como en el sector energético" /evs/DP/mis