WASHINGTON, 28 nov (Reuters) - El Pentágono está estudiando una propuesta de Boeing para suministrar a Ucrania bombas de precisión pequeñas y baratas, instaladas en cohetes disponibles en abundancia, lo que permitiría a Kiev atacar las líneas rusas a mayor distancia, mientras Occidente se esfuerza por satisfacer la mayor demanda de armas.

Los inventarios militares de Estados Unidos y sus aliados se están reduciendo, y Ucrania se enfrenta a una creciente necesidad de armas más sofisticadas a medida que la guerra se prolonga.

El sistema propuesto por Boeing, denominado Bomba de Pequeño Diámetro Lanzada desde Tierra (GLSDB, en inglés), es uno de media docena de planes para poner en producción nuevas municiones para Ucrania y los aliados estadounidenses en Europa del Este, según fuentes del sector.

Estados Unidos ha rechazado las peticiones para entregar el misil ATACMS de 297 kilómetros de alcance, pero los 150 kilómetros de la GLSDB permitiría a Ucrania alcanzar valiosos objetivos militares que han estado fuera de su alcance, le ayudaría a seguir presionando con sus contraataques e interrumpiendo las zonas de retaguardia rusas.

El GLSDB podría entregarse ya en la primavera boreal de 2023, según un documento revisado por Reuters, y según tres personas familiarizadas con el plan. Combina la bomba de pequeño diámetro GBU-39 (SDB) con el motor de cohete M26, ambos comunes en los inventarios estadounidenses.

Doug Bush, jefe de compras de armas del Ejército de Estados Unidos, dijo a periodistas la semana pasada que también estaban estudiando la posibilidad de acelerar la producción de proyectiles de artillería de 155 milímetros -que en la actualidad sólo se fabrican en instalaciones gubernamentales- permitiendo que lo hagan los contratistas de defensa.

La invasión rusa a Ucrania impulsó la demanda por armas y municiones de fabricación estadounidense, y los aliados de Estados Unidos en Europa del Este están "haciendo muchos pedidos" de armas para abastecer a Ucrania, añadió Bush.

"Se trata de conseguir cantidad a un bajo costo", dijo Tom Karako, experto en armas y seguridad del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales. La caída de los inventarios de Estados Unidos ayuda a explicar la prisa por conseguirlas ahora, añadió.

(Reporte de Mike Stone en Washington; Editado en español por Javier López de Lérida)