La audiencia del Comité de Transportes e Infraestructuras de la Cámara de Representantes "Mejorar el patrón oro de Estados Unidos en seguridad aérea" se produce en medio de un creciente escrutinio de la FAA después de que un fallo informático provocara el mes pasado la primera parada en tierra a escala nacional desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 e interrumpiera más de 11.000 vuelos.

El administrador asociado de la FAA para la seguridad de la aviación, David Boulter, la presidenta de la NTSB, Jennifer Homendy, el presidente de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, Jason Ambrosi, el director general de la Asociación Nacional de Aviación de Negocios, Ed Bolen, y el director general de la Asociación de Fabricantes de Aviación General, Pete Bunce, figuran entre los testigos, según informó el comité el miércoles.

Los legisladores están considerando posibles reformas de la FAA antes de la fecha límite del 30 de septiembre para reautorizar la agencia.

"La FAA funciona con el piloto automático. Sólo puede funcionar con el piloto automático hasta cierto punto antes de que se quede sin gasolina, se despierte y esté sobre Utah", dijo el representante Sam Graves, republicano que preside el panel de transporte.

Billy Nolen, responsable de seguridad aérea, ha sido administrador en funciones de la FAA desde el 1 de abril, cuando Steve Dickson dejó el cargo a mitad de su mandato de cinco años. El Comité de Comercio del Senado aún no ha programado una audiencia sobre el candidato del presidente Joe Biden para la FAA, que ha suscitado las críticas de los republicanos. Nolen declinó responder a las críticas de Graves.

Después de que dos accidentes mortales de Boeing 737 MAX mataran a 346 personas en 2018 y 2019, el Congreso aprobó una amplia legislación para reformar la forma en que la FAA certifica las nuevas aeronaves.

Los legisladores dijeron en un informe de 2020 que "la FAA falló en su supervisión de Boeing y en su certificación del avión". El mes pasado, la FAA nombró a dos docenas de expertos para revisar los procesos de gestión de la seguridad y la cultura de seguridad de Boeing.

El viernes, la FAA informó a los legisladores de que había realizado cambios para evitar que se repitiera el fallo del sistema informático que provocó la parada en tierra del 11 de enero.