SHANGHÁIReuters) - China Telecom Corp, incluida en la lista negra del gobierno estadounidense, se disparaba en su primer día de cotización el viernes, desafiando a un mercado bajista y tras su recaudación de 7.300 millones de dólares a través de una oferta pública, la mayor del mundo en 2021.

Las acciones del gigante de las telecomunicaciones abrieron con una subida del 5,7%, pero terminaba la sesión matutina con un alza de casi el 20%. La ganancia es más espectacular en un mercado bajista que vio cómo el índice de referencia CSI300 caía un 2,4%.

La operación es la mayor salida a bolsa de las denominadas "acciones A", acciones nacionales que se negocian en las bolsas de China, desde la salida a bolsa de PetroChina Co Ltd de 8.900 millones de dólares en Shanghái en 2007, según datos de Refinitiv.

Liam Zhou, fundador del fondo de cobertura con sede en Shanghai Minority Asset Management (MAM), dijo que la apertura era débil, dada la enorme recaudación de fondos de China Telecom y las enormes primas sobre sus homólogas cotizadas en Hong Kong.

Sin embargo, a corto plazo, el precio de las acciones recibirá el apoyo del llamado mecanismo de sobreasignación "green shoe", así como de sus accionistas estatales, dijo.

Las acciones de China Telecom que cotizan en Hong Kong caían hasta un 6,8% el viernes, cotizando aproximadamente a la mitad del precio de sus homólogas de Shanghái.

China Telecom, que cotiza en Estados Unidos y fue expulsada de la bolsa estadounidense en mayo, había recaudado 47.100 millones de yuanes (7.300 millones de dólares) en Shanghái al ampliar su canal de financiación en su país.

El debut se produce después de que un número cada vez mayor de empresas chinas que cotizan en Estados Unidos estén vendiendo acciones públicamente en Hong Kong o en China continental en medio de las tensiones entre China y Estados Unidos.

Su rival estatal China Mobile también ha solicitado cotizar en Shanghái, mientras que una unidad de China United Network Communications Group (China Unicom) cotizó en 2002.

(Reporte de la redacción de Shanghái y Scott Murdoch en Hong Kong; Editado por Uttaresh.V y Sam Holmes, traducido por Michael Susin)