(Alliance News) - La relación entre política, economía y banca varía según las perspectivas de los empresarios, los banqueros y los responsables políticos, tal y como escribe Milano Finanza el viernes.

Con respecto al acuerdo Unicredit-Commerzbank, la Comisión Europea ha dejado claro que la fusión no es una cuestión política, sino un asunto que compete a los reguladores bancarios como el BaFin y la supervisión del BCE.

Esto representa una crítica indirecta al gobierno alemán, que, como poseedor del 12% de Commerzbank, no puede influir en las transacciones sin un título adecuado, continúa el periódico.

La normativa europea prohíbe las distinciones arbitrarias y, aunque el papel de la política en el sector no financiero es limitado, aún puede influir en las fusiones a través de medidas generales y reglamentarias.

Salvaguardar el ahorro es una responsabilidad clave de las instituciones políticas y de las autoridades supervisoras.

Fabio Panetta destacó la importancia de las fusiones bancarias para mejorar la eficacia y apoyar la economía real.

Si un gobierno es el mayor accionista de un banco, debe tratar a todos los accionistas de forma justa, evitando conflictos con la normativa.

UniCredit ha actuado con justicia, y el apoyo de la autoridad supervisora a su petición de aumentar su participación al 29% en Commerzbank está empezando a materializarse.

Es urgente que todas las partes implicadas lleguen a una decisión clara, evitando más retrasos.

Por Claudia Cavaliere, reportera de Alliance News

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