CATL, el mayor fabricante de baterías para vehículos eléctricos (VE) del mundo, informó el viernes de una caída del 23,6% en el beneficio del primer trimestre, su primer descenso en dos años, mientras lucha contra el aumento de los costes de las materias primas y el resurgimiento del COVID-19 en China.

CATL, entre cuyos clientes se encuentran Tesla, Volkswagen y BMW, obtuvo un beneficio neto de 1.490 millones de yuanes (226,69 millones de dólares), según se desprende de una presentación en la Bolsa de Shenzhen.

Esta cifra es inferior al beneficio de 1.950 millones de yuanes del año anterior, a pesar de un gran aumento de los ingresos, que ascendieron a 48.680 millones de yuanes, frente a los 19.170 millones del año anterior.

Los precios de los metales clave, como el litio, casi se duplicaron en los tres primeros meses, lo que pesó sobre los márgenes de beneficio de CATL y le llevó a subir los precios de las baterías en marzo.

Otros fabricantes de baterías han registrado menores beneficios en el trimestre de marzo, afectados por el aumento de los costes de las materias primas y las interrupciones en la cadena de suministro. La surcoreana LG Energy Solution Ltd (LGES) comunicó a principios de esta semana una caída del 24% en sus beneficios trimestrales.

Al igual que sus rivales, CATL está aumentando la producción y el abastecimiento de minerales para satisfacer la creciente demanda de vehículos eléctricos.

A principios de este mes dijo que se había asegurado los derechos de exploración de un yacimiento de arcilla de litio en la provincia central de Jiangxi en China y que había creado una empresa conjunta en Indonesia para la extracción de níquel.

La consultora Wood Mackenzie afirma que CATL está en camino de triplicar con creces su capacidad de fabricación de células para 2025.

CORTE POSIBLE

El margen de beneficio bruto de las baterías para vehículos eléctricos de CATL se redujo al 22% en 2021 desde el 26,56% del año anterior.

La empresa con sede en Ningde, Fujian, se mantuvo muy por delante de sus competidores en el mercado nacional. El 51% de las baterías de níquel-cobalto-manganeso (NCM) y el 49% de las de fosfato de litio (LFP) instaladas en los vehículos eléctricos de China en los tres primeros meses eran de CATL, según el Instituto de Investigación de Baterías de Automoción de China.

En comparación, su rival BYD suministra el 1,6% de las baterías de NCM y el 34% de las de LFP, mientras que LG Energy llevaba su nombre en el 6% de las baterías de NCM instaladas, según el instituto.

(1 dólar = 6,5852 yuanes chinos renminbi) (Información de Zhang Yan, Brenda Goh y la redacción de Hong Kong; edición de Elaine Hardcastle)