Coty, amplía su asociación estratégica con Cruelty Free International, la principal organización mundial que trabaja para acabar con las pruebas en animales. Las potentes marcas de Coty, Rimmel, Manhattan y Risqué, están ahora aprobadas bajo el Programa Leaping Bunny de Cruelty Free International, uniéndose a la marca de Coty, COVERGIRL, que fue aprobada en 2018. Como una de las marcas de belleza globales con presencia en más de 80 países, la aprobación de Rimmel junto a CoverGirl, es un paso importante en la democratización de la belleza libre de crueldad a nivel mundial.

Manhattan, una marca de masas líder en Alemania fundada en 1964, ha defendido durante mucho tiempo la autoexpresión y ahora tiene la misión de ofrecer cosméticos de color que sean más amables con las personas, los animales y el planeta. Para Risqué, la marca brasileña de esmaltes de uñas número uno que lleva más de 60 años en el mercado, la aprobación de Leaping Bunny es un paso más para cumplir su propuesta de elección inteligente, ofreciendo productos de alta calidad a un precio justo. El programa Leaping Bunny de Cruelty Free International es el estándar de oro mundialmente reconocido para los cosméticos, el cuidado personal, el hogar y los productos de limpieza libres de crueldad, con requisitos que van más allá de las exigencias legales que restringen las pruebas en animales.

La aprobación debe otorgarse a toda la gama de una marca - no se pueden aprobar productos individuales. Coty colaboró con Cruelty Free International para investigar de forma forense toda su cadena de suministro para Rimmel, Manhattan y Risqué. Este riguroso proceso incluyó una auditoría sobre los proveedores, las materias primas y los ingredientes individuales de cada marca.

El programa Leaping Bunny de Cruelty Free International es la única aprobación global de productos libres de crueldad que también requiere que las marcas apliquen un sistema de control de proveedores para garantizar el cumplimiento continuo. Los productos de Rimmel, Manhattan y Risqué llevarán el logotipo de Leaping Bunny a finales de este año, lo que supone la mejor garantía para los consumidores de que una empresa se ha comprometido realmente a ayudar a acabar con las pruebas en animales y se adhiere a los estrictos criterios del Programa.