Las OPAs no solicitadas se convertirán con el tiempo en una práctica común en Japón debido a los esfuerzos del gobierno por desestigmatizar esta práctica, afirmó el consejero delegado de Dai-ichi Life tras su éxito en cerrar un acuerdo de 2.000 millones de dólares para adquirir una empresa con una oferta inesperada.

La aseguradora de vida presentó una oferta por Benefit One en diciembre, a pesar de que el proveedor de beneficios para empleados ya había aceptado una oferta más baja de la empresa de información sanitaria digital M3.

La maniobra levantó ampollas en Japón, donde las ofertas no solicitadas siguen siendo raras y porque las aseguradoras de vida están consideradas entre las empresas más conservadoras en la conformista cultura empresarial del país.

"Decidimos hacer la oferta por necesidad estratégica", declaró a Reuters en una entrevista el consejero delegado, Tetsuya Kikuta, afirmando que la empresa necesitaba desarrollar nuevos negocios a medida que se estanca la demanda de seguros debido al descenso de la población japonesa.

"Nos habíamos preparado para recibir más reacciones negativas a nuestro movimiento, pero afortunadamente, escuchamos muchos comentarios positivos de la gente de los mercados de capitales".

Aunque la oferta no era solicitada, Dai-ichi Life estipuló que sólo procedería con su oferta si Benefit One y su empresa matriz Pasona aceptaban los términos, lo que subraya la todavía profunda reticencia entre las empresas japonesas a realizar adquisiciones hostiles.

Los problemas de reputación asociados a las ofertas no solicitadas fueron discutidos por el consejo de Dai-ichi Life, pero las nuevas directrices del gobierno sobre adquisiciones contribuyeron a facilitar la decisión, dijo Kikuta.

El Ministerio de Economía, Comercio e Industria publicó el año pasado unas directrices sobre fusiones y adquisiciones destinadas a acabar con las tácticas de defensa excesivas y a fomentar las adquisiciones, eliminando un estigma que existía desde hacía tiempo en torno a las ofertas no solicitadas.

Los ejecutivos de los bancos también afirman que ya no dudan en financiar o asesorar a un adquirente hostil.

Cuando se le preguntó si Dai-ichi Life podría lanzar otra oferta no solicitada, Kikuta dijo que no lo sabía, pero añadió: "Creo que este tipo de operaciones serán más habituales a medida que pase el tiempo."

Un aumento de las ofertas no solicitadas probablemente hará subir las valoraciones de las operaciones en Japón, ya que los pretendientes de las empresas objetivo tendrían que tener en cuenta la posibilidad de contraofertas, afirmó. (Reportaje de Makiko Yamazaki y Ritsuko Shimizu; Edición de Edwina Gibbs)