BONN (dpa-AFX) - La Agencia Federal de Redes se ha negado a dar marcha atrás en la disputa legal sobre una subasta de telefonía móvil de mil millones de euros en 2019. El jefe de la Agencia Federal de Redes, Klaus Müller, ha presentado en Bonn un recurso de apelación ante el Tribunal Administrativo Federal. Las cuestiones clave debían aclararse en el alto tribunal. En la subasta se subastaron derechos de uso de frecuencias de importancia central para las redes del estándar de comunicaciones móviles 5G.

La autoridad había sufrido una derrota en el tribunal administrativo de Colonia el verano pasado: Según la sentencia, la determinación de las reglas del juego para la subasta en aquel momento fue ilegal debido a la posible influencia del Ministerio Federal de Transportes. No se había garantizado la independencia de la Agencia de la Red y la autoridad no se había protegido lo suficiente. El Ministro Federal de Transportes en aquel momento era el político de la CSU Andreas Scheuer.

Los dos proveedores de telecomunicaciones Freenet y EWE Tel habían presentado una demanda, alegando que se habían visto perjudicados. En aquel momento, la Agencia Federal de Redes había decidido no dictar la llamada obligación de proveedor de servicios: una normativa de este tipo habría ayudado a los demandantes a alquilar a bajo precio en la red de telefonía móvil de los operadores de red establecidos. Las consecuencias exactas de la sentencia de Colonia no estaban claras en un principio, e incluso se habló de anular la subasta. Al recurrir ante el Tribunal Administrativo Federal, la Agencia de la Red evita ahora que la sentencia sea jurídicamente vinculante por el momento.

De cara a la próxima asignación de frecuencias

Mientras el litigio judicial trata de mirar hacia atrás, la Agencia de la Red y los representantes de las empresas también miraron hacia delante en una audiencia celebrada en Bonn: se trataba de la próxima asignación de otras frecuencias de telefonía móvil cuyos derechos de uso expiran a finales de 2024. Una vez más, no habrá obligación de proveedor de servicios.

La autoridad también pretende prescindir de una subasta de frecuencias y prorrogar los derechos de uso durante cinco años. A cambio, sin embargo, se obligará a los operadores de red establecidos Deutsche Telekom, Vodafone y O2 Telefónica a proporcionar mejores redes de telefonía móvil: a principios de 2030, el 99,5% de Alemania deberá estar cubierto por una red de telefonía móvil con una velocidad de descarga de al menos 50 megabits. El año pasado, Telekom criticó esta medida por considerarla demasiado ambiciosa y cara. En la audiencia del jueves, el jefe de la autoridad, el Sr. Müller, reafirmó este compromiso./wdw/DP/mis