Aunque es necesario permanecer alerta en caso de descenso de las temperaturas, el hecho de que los hogares y las empresas francesas hayan atendido a los llamamientos para reducir su consumo de energía es una gran ayuda, declaró Wargon a la radio France Inter.

El gobierno se ha fijado el objetivo de recortar el consumo energético de Francia en un 10% para 2024 respecto a los niveles de 2019, como parte de un amplio plan que incluye apagar las luces y bajar los termostatos para evitar cortes de electricidad y gas durante el invierno en medio de la guerra en Ucrania.

Según el operador de la red francesa RTE, el consumo de electricidad cayó un 8,7% en las últimas cuatro semanas en comparación con la media del mismo periodo en 2014-2019.

"El llamamiento a la moderación ha sido realmente escuchado", dijo Wargon.

"Seguimos atentos y vigilantes" por si bajan las temperaturas, dijo, y añadió que "hasta mediados de enero, sabemos que no tendremos problemas".

Wargon dijo también que se espera que el parque nuclear francés, actualmente afectado por trabajos de mantenimiento y reparación, alcance una capacidad de producción de 45 gigavatios (GW) en enero.

No descartó que pudiera llegar hasta la proyección de EDF de casi 50 GW.