El gobierno posee ahora el 92,71% de los derechos de voto de EDF, dijo el ministerio, marcando el final exitoso del procedimiento de adquisición total, lanzado por el gobierno del presidente Emmanuel Macron el verano pasado, que costó a París unos 10 millones de dólares.

La endeudada EDF, el mayor operador de energía nuclear de Europa, gestiona el parque de reactores nucleares de Francia, algunas centrales hidroeléctricas y otros centros de producción y suministra electricidad a millones de hogares.

Su salida de la bolsa de París supondrá el fin de una era para la empresa de servicios públicos que fue parcialmente privatizada en 2005, cuando una parte de su capital social salió a bolsa a 33 euros (35,82 dólares) la acción.

El año pasado, el gobierno ofreció a los accionistas minoritarios 12 euros por acción, lo que supone una prima del 53% sobre el valor de cotización de la empresa en aquel momento, después de que EDF sufriera diversos contratiempos, como paradas imprevistas de los reactores, retrasos y sobrecostes en la construcción de nuevas centrales y topes en las tarifas eléctricas impuestos por el gobierno.

(1 dólar = 0,9213 euros)