Eramet es uno de los pocos actores franceses activos en los sectores minero y metalúrgico. Genera el 63% de sus ventas a partir del manganeso, su principal actividad gracias a la mina de Moanda, en Gabón. Este metal es esencial para la producción de acero, su principal salida.

Usos del manganeso (fuente: Eramet)

El níquel es la segunda actividad importante del grupo. Representa el 28% de las ventas. Eramet explota dos yacimientos: en Indonesia, la mina de Weda Bay se ha convertido recientemente en la primera mina de níquel del mundo. El segundo yacimiento, más pequeño, está situado en Nueva Caledonia. El año pasado experimentó importantes dificultades de producción como consecuencia del intenso mal tiempo en la región. Históricamente, esta mina ha sido fuente de complejos problemas, cuyas causas se remontan a los orígenes de la empresa. Eramet es uno de los mayores empleadores de la isla y se enfrenta regularmente a tensiones con la población local. Las razones son múltiples: deseo de independencia, desempleo elevado y sentimiento de expropiación de los recursos del territorio. Este clima tenso crea un riesgo que los inversores no pueden ignorar.

Usos del níquel (fuente: Eramet)

La tercera actividad, las arenas mineralizadas (circón, utilizado en cerámica, y materias primas que contienen titanio, transformadas en escorias de titanio, utilizadas en pigmentos), representa el 9% de las ventas. Estos productos se extraen en Senegal y se transforman en plantas de Noruega.

Proceso de extracción y tratamiento de arenas mineralizadas (fuente: Eramet)

Un grupo expuesto al acero, y por tanto a Asia

Eramet tiene una fuerte presencia internacional, con una actividad predominante en Asia, que representa el 46% de sus ingresos. China es el país con mayor demanda, ya que es responsable de más de la mitad de la producción mundial de acero. Esta fuerte demanda se traduce en una elevada demanda de manganeso. Las demás fuentes de ingresos de Eramet proceden de Europa (24%, excluida Francia), Norteamérica (6%), Francia (6%) y otras regiones (17%).

Fuente: Eramet

Como se informó anteriormente, Eramet tiene previsto iniciar la extracción de litio el año que viene, con el objetivo de producir 24.000 toneladas anuales en 2026. La empresa ya se ha hecho con los derechos de explotación de una importante concesión de litio en la provincia argentina de Salta. El litio se utiliza principalmente en los sectores de la energía y el almacenamiento, sobre todo en baterías. Su precio subió considerablemente a finales de 2022, llegando a superar los 81.000 euros por tonelada. El 21 de mayo, el precio había vuelto a caer a unos 40.000 euros. Esto no resta potencial al negocio, que permitirá al grupo minero posicionarse en un sector de gran demanda. Sin embargo, no se espera que la extracción funcione a pleno rendimiento hasta 2026 como muy pronto, lo que explica que el consenso de los analistas no prevea un crecimiento antes de 2025.

Resultados extremadamente cíclicos

El año pasado, Eramet registró unas ventas de algo más de 5.000 millones de euros, con un margen neto récord del 14,8% gracias a la subida de los precios de los metales. Sin embargo, el extraordinario ejercicio 2022 no debe ocultar el bosque. En el ciclo de 2013 a 2021, el crecimiento es prácticamente nulo, con una caída de las ventas de 3.160 millones de euros a 3.670 millones. En cuanto a los beneficios -beneficios y flujo de caja libre combinados-, alternan pérdidas elevadas y baja rentabilidad. Estos resultados, cuando menos mediocres, se reflejan en el precio de la acción, que se sitúa en el nivel de julio de 2014. No obstante, cabe destacar la calidad del balance, con una deuda bajo control cercana a 0,7 veces el EBITDA, según las previsiones para este año.

El ejercicio en curso se caracteriza lógicamente por una fase de normalización debida a la caída de los precios de los metales. Los resultados semestrales reflejan una caída más acusada de lo previsto de los precios del manganeso y el níquel. En consecuencia, el grupo ha tenido que rebajar sus previsiones de EBITDA a unos 900 millones de euros, frente a una previsión inicial de 1.100 millones. Los beneficios cayeron un 86% y el EBITDA un 71%.

Fuente: MarketScreener

La vida de Eramet no es un río largo y tranquilo

Dada su actividad estratégica, Eramet desempeña un papel importante en la disponibilidad, el control y el suministro de recursos mineros. Y cuando se trata de la soberanía nacional, los sectores privado y público no están disociados. El Estado es accionista en un 27,1% y ha intervenido en varias ocasiones, ya sea para participar en diversas ampliaciones de capital o para aliviar tensiones, como ocurrió en 2021 durante el conflicto entre la consejera delegada Christel Bories y la familia Duval. La familia Duval controla el 37,1% del capital desde que el grupo minero se hizo con Aubert & Duval, una empresa francesa especializada en metalurgia. La familia criticaba a Christel Bories por su falta de competencias en la gestión de la empresa, en particular de la filial de níquel y de Aubert & Duval. Se ha llegado a un acuerdo sobre la venta de Aubert & Duval, lo que ha permitido apaciguar a las distintas partes interesadas.

La complejidad accionarial de Eramet no se limita al Estado francés. La Société Territoriale Calédonienne de Participations Industrielles (STCPI), entidad pública de Nueva Caledonia, posee el 4% del grupo y el 34% de la mina de níquel situada en su territorio. El yacimiento de extracción de níquel precioso de Weda Bay, en Indonesia, pertenece en un 57% al grupo chino Tsingshan. En el manganeso, los intereses están de nuevo entrelazados, con una participación del Estado gabonés del 28,9% en Comilog, la filial dedicada a la actividad. Por último, en arenas mineralizadas, la República de Senegal posee una participación del 10%.

Además de esta excepcional y complicada situación de capital, Eramet adolece de falta de masa crítica, a menudo necesaria en este sector. En comparación con sus competidores australianos, sudafricanos y canadienses, Eramet sigue siendo un actor pequeño en el sector minero. En consecuencia, los fondos anglosajones sólo tienen una presencia muy reducida en el capital de Eramet.

Un caso de extraordinaria complejidad

Eramet desempeña un papel activo en las necesidades de abastecimiento de metales de Francia. Es una empresa estratégicamente vital si queremos avanzar hacia un modelo de transición. La compleja estructura accionarial crea muchas fricciones porque los intereses no siempre convergen. Hay que vigilar las dificultades encontradas en Nueva Caledonia. Eramet es una empresa especulativa, sobre todo en lo que se refiere a las expectativas en litio. No se espera que esta actividad alcance su velocidad de crucero hasta dentro de varios ejercicios. Por último, los resultados semestrales no son alucinantes. La visibilidad sobre los precios futuros de los metales es escasa, por lo que somos prudentes y excluimos el valor de nuestra cartera Europa y del fondo Europa One.

Clasificaciónes Surperformance de Eramet