Los asesores del tribunal han facturado casi 30 millones de dólares por una subasta estancada de acciones de una empresa matriz de la refinería de petróleo de propiedad venezolana Citgo Petroleum, lo que ha levantado la ira de los acreedores que han esperado años para obtener una compensación.

Citgo, la joya de la corona de los activos de Venezuela en el extranjero, se encuentra en el centro de una subasta judicial en Delaware en la que 18 empresas tratan de cobrar hasta 21.300 millones de dólares por impagos de deuda y expropiaciones en el país sudamericano.

Las ofertas en la segunda ronda de la subasta se presentaron este año, y los asesores, incluido un funcionario designado por el tribunal para supervisar el proceso, debían entregar un ganador recomendado en julio.

Los asesores pasaron a negociar exclusivamente con una filial del inversor Elliott Investment Management, lo que ha dado lugar a una oferta a la que muchos acreedores se oponen por considerarla deficiente.

En una presentación judicial, cuatro acreedores impugnaron la factura de 4,1 millones de dólares de los asesores correspondiente al mes de septiembre, alegando que los honorarios "han aumentado en una cantidad asombrosa" y que era probable que subieran más. La última factura es cinco veces y media superior a los honorarios de septiembre de 2023 e incluye los costes de más de 70 empleados del bufete, con cargos individuales de hasta 2.350 dólares la hora.

Rusoro Mining, que tiene pendiente una reclamación de 1.480 millones de dólares en el caso, también criticó la reelaboración de una propuesta por parte de los asesores, calificando el resultado ni de "mejora material ni de avance útil".

El juez estadounidense Leonard Stark reprendió la semana pasada al bufete de abogados Weil, Gotshal & Manges, al banquero de inversión Evercore y al funcionario judicial Robert Pincus por no seguir sus normas en sus tratos con la filial de Elliott, Amber.

Los representantes de Weil, Evercore y Pincus no respondieron a las solicitudes de comentarios.

Stark propuso redirigir la subasta, dejar atrás una de las líneas rojas fijadas por Amber, proporcionar los detalles de las ofertas a las 18 empresas y darles voz y voto en el reparto de los ingresos.

Amber ha amenazado con retirarse si la subasta procede como Stark ha indicado que quiere que vaya. Un portavoz de Amber no hizo ningún comentario inmediato.

Se espera que el proceso revisado dé lugar al menos a dos ofertas una vez que Citgo vuelva a tener acceso a sus datos financieros y operativos. El ganador podría recibir tres refinerías de petróleo estadounidenses, oleoductos, terminales de distribución y el suministro de combustible a 4.200 puntos de venta al por menor.

Los grupos implicados en la subasta han dicho repetidamente a Pincus que "debería dejar de perder tiempo y dinero persiguiendo la oferta inviable e inadecuada de Elliott", escribió un abogado de Venezuela al tribunal.