17 mar (Reuters) - Las acciones del First Republic Bank se desplomaron casi un 33% el viernes, lo que las deja con una caída de más del 80% en las últimas 10 sesiones, a pesar de un paquete de rescate con 30.000 millones de dólares en depósitos inyectados por grandes bancos estadounidenses.

El atribulado prestamista estaba en conversaciones para obtener dinero de otros bancos o empresas de capital privado mediante la venta de nuevas acciones, informó el viernes por la tarde The New York Times, citando a tres personas con conocimiento del proceso. El banco también podría negociar su venta, según el informe. First Republic declinó hacer comentarios.

Las preocupaciones sobre la salud del banco llevaron a los principales agentes de poder de Estados Unidos, incluida la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, y el presidente ejecutivo de JPMorgan, Jamie Dimon, a elaborar un acuerdo de rescate sin precedentes el jueves.

El prestamista también dijo que había pedido prestados hasta 109.000 millones de dólares a la Fed y otros 10.000 millones de dólares al Banco Federal de Préstamos Hipotecarios el 9 de marzo.

"La importancia de los cambios en el balance (de la empresa) en sólo una semana son asombrosos (...) y junto con la suspensión del dividendo de acciones ordinarias, pinta un panorama muy sombrío para la empresa y los accionistas", dijo el director gerente de KBW, Chris McGratty.

A última hora del viernes, Moody's rebajó la calificación de la deuda de First Republic Bank para reflejar sus "importantes retos".

Las acciones de los bancos de Wall Street -entre ellos JPMorgan Chase & Co, Citigroup Inc, Bank of America Corp y Wells Fargo & Co- que participaron en el rescate del prestamista con sede en San Francisco cayeron entre un 2% y un 4% el viernes.

PacWest Bancorp, con sede en Los Ángeles y sociedad de cartera de Pacific Western Bank, se desplomó casi un 19% durante la sesión bursátil del viernes. Al cierre de la jornada, el banco dijo en un comunicado que tenía más de 10.800 millones de dólares en efectivo disponible, superando el total de sus depósitos no asegurados.

Fundado en 1985, First Republic tenía 212.000 millones de dólares en activos y 176.400 millones en depósitos a finales del año pasado, según su informe anual.

"Posiblemente el mercado esté buscando una venta/compra total en lugar de una inyección de capital", dijo John Petrides, gestor de carteras de Tocqueville Asset Management, añadiendo que la situación no ha terminado.

El perfil de beneficios del banco está "claramente deteriorado" y los "nuevos depósitos cubren de forma efectiva los 30.500 millones de dólares de depósitos no asegurados que aún permanecen en el balance de FRC, dando tiempo a que explore probablemente una venta", escribieron los analistas de Jefferies dirigidos por Ken Usdin en una nota a clientes.

Los bancos que formaron parte del paquete de rescate son sus pretendientes más obvios para una adquisición, pero es menos probable que el gobierno estadounidense respalde una compra por parte de las entidades más grandes, dijo una fuente que declinó ser identificada debido a lo delicado de la situación.

El paquete de rescate llegó menos de un día después de que el banco suizo Credit Suisse obtuviera un préstamo de emergencia del banco central helvético por hasta 54.000 millones de dólares para reforzar su liquidez.

Datos de la Fed mostraron el jueves que los bancos solicitaron un récord de 152.900 millones de dólares en liquidez de emergencia al banco central estadounidense en los últimos días, superando el máximo anterior que se estableció durante la fase más aguda de la crisis financiera.

Los préstamos ponen de manifiesto las "tensiones de financiación y liquidez de los bancos, impulsadas por el debilitamiento de la confianza de los depositantes", dijo Moody's. La agencia de calificación había rebajado su perspectiva sobre el sistema bancario estadounidense a negativa a principios de esta semana.

(Reporte de Joice Alves en Londres, Tatiana Bautzer en Nueva York y Medha Singh en Bengaluru; reporte adicional de Tatiana Bautzer en Nueva York y Noel Randewich en Oakland, California; editado en español por Javier Leira y Carlos Serrano)