Las acciones de la empresa cayeron un 3% en las operaciones previas al toque de campana.
La empresa con sede en California espera ahora que se produzcan entre 32.000 y 36.000 unidades en 2023, frente a su objetivo anterior de 42.400 coches.
Para el segundo trimestre, la empresa espera producir entre 1.400 y 1.700 vehículos.
La empresa registró una pérdida neta de 120,6 millones de dólares, o 38 céntimos por acción, en el primer trimestre, frente a una pérdida de 122,07 millones de dólares, o 41 céntimos por acción, un año antes.