Es probable que los fabricantes de automóviles reduzcan su capacidad de producción en los dos continentes en 2025, ya que se enfrentan a los objetivos de emisiones y a los aranceles, mientras que el dominio de los vehículos eléctricos (VE) por parte de China aumentará debido a su ventaja en software y electrificación, según la firma.
Los cierres o las ventas son más probables en los países con costes elevados, donde la presión política y social se verá contrarrestada por la creciente competencia, declaró a Reuters Pedro Pacheco, analista VP de Gartner.
"Esto es un poco como una olla a presión", dijo Pacheco. "La presión aumenta, aumenta y... eso empujará a los fabricantes de automóviles a tomar decisiones más pragmáticas".
Las marcas chinas podrían comprar plantas para superar las barreras comerciales, o abrir nuevas fábricas en países europeos con costes más bajos y en socios de libre comercio como Marruecos o Turquía, predijo la firma.
Ante el temor de que las normas sobre emisiones de CO2 de la Unión Europea para 2025 provoquen trastornos, el director general del proveedor automovilístico alemán Bosch, Stefan Hartung, declaró el miércoles a la publicación Auto Motor und Sport que el bloque debería abstenerse de multar a las empresas que no cumplan los objetivos.
La industria automovilística europea ya no está en vías de alcanzar sus objetivos de vehículos eléctricos para 2030 y 2035, según Luc Chatel, presidente del grupo de presión automovilístico francés PFA.
"El riesgo es que acabemos reduciendo las ventas de vehículos de combustión para reforzar artificialmente" las de VE, declaró a Reuters.
A pesar de los retos que plantea la electrificación, Gartner prevé que los envíos de autobuses, coches, furgonetas y camiones pesados eléctricos crezcan en conjunto un 17% en 2025. Prevé que más del 50% de todos los modelos de vehículos comercializados por los fabricantes de automóviles sean VE en 2030.
Para lograr el cambio, los fabricantes de automóviles heredados pueden comprar arquitectura de software a los fabricantes de VE más recientes y a empresas digitales, impulsar centros de investigación y desarrollo en centros tecnológicos o asociarse con empresas tecnológicas para crear empresas conjuntas de VE autofinanciadas, dijo Pacheco.