El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha dejado en claro que quiere que los inversionistas "mexicanicen" la unidad, haciendo flotar nombres de multimillonarios mexicanos como Ricardo Salinas, de Banco Azteca, y Carlos Hank González, de Banorte, como posibles compradores.

"Es completamente razonable que el gobierno tenga una visión de quién es el mejor administrador para una de las entidades financieras más grandes del país", dijo Paco Ybarra, director general del Grupo de Clientes Institucionales de Citi, al periódico local El Financiero.

"Es un factor más en el proceso de decisión, no es algo que consideremos decisivo y está abierto a todas las opciones posibles", dijo Ybarra, subrayando que la venta está abierta a compradores extranjeros.

El jefe de país de Citi, Manuel Romo, anunció en marzo que Ybarra dirigirá la venta.

El ejecutivo se encuentra actualmente en la Ciudad de México antes de que el banco anuncie los términos de la venta, informaron varios medios.

En febrero, Romo dijo que Citibanamex podría venderse directamente o a través de una oferta pública inicial, pero no por partes.

Ybarra también dijo al medio local El Economista que para Citi "es importante que el comprador pague lo que sabemos que (la unidad) vale".

Los analistas han dicho que Citibanamex podría salir por entre 4.000 y 8.000 millones de dólares, aunque Citi, que pagó 12.500 millones de dólares por la unidad en 2001, aún no ha nombrado un precio.

El banco mexicano Banorte dijo en marzo que si lanza una oferta exitosa, invitará a "todos los mexicanos" a participar en la compra.