Mike Lynch, el fundador tecnológico que en su día fue aclamado como la respuesta británica a Steve Jobs, subirá al estrado en su propia defensa el jueves en un tribunal federal de San Francisco, a medida que se acerca a su fin el juicio en el que se le acusa de estafar a Hewlett-Packard en un acuerdo de 11.000 millones de dólares para adquirir su empresa.

El testimonio es un momento crucial en la saga legal de 13 años que comenzó con la desastrosa compra por parte de HP de Autonomy, la empresa de software de la que Lynch fue cofundador, en 2011.

El acuerdo supuso una enorme pérdida para la empresa de Silicon Valley. HP rebajó el valor de Autonomy en 8.800 millones de dólares en 2012, alegando que había descubierto graves irregularidades contables.

Lynch y el ex ejecutivo financiero de Autonomy Stephen Chamberlain se enfrentan a cargos de fraude y conspiración por supuestamente maquinar para inflar los ingresos de la empresa a partir de 2009, en parte para atraer a un comprador.

Los fiscales afirman que la pareja rellenó las finanzas de Autonomy mediante acuerdos con fechas anteriores y acuerdos de "ida y vuelta" que adelantaban efectivo a los clientes a través de contratos falsos.

En el juicio que comenzó a mediados de marzo, los miembros del jurado han escuchado a más de 30 testigos del gobierno, entre ellos Leo Apotheker, el ex director ejecutivo de HP que fue despedido semanas después de que se anunciara el acuerdo con Autonomy.

El equipo legal de Lynch ha argumentado en el juicio que HP estaba tan ansiosa por embolsarse Autonomy y dejar fuera a posibles competidores que se precipitó en la diligencia debida antes de la venta.

El abogado de Lynch dijo en los alegatos iniciales que el empresario educado en Cambridge estaba centrado en cuestiones tecnológicas y dejaba los asuntos monetarios a Sushovan Hussain, entonces director financiero de Autonomy.

Hussain fue condenado por separado en 2018 en un juicio en el mismo tribunal. Salió de la cárcel estadounidense en enero tras cumplir una condena de cinco años.

La compra de Autonomy, uno de los mayores acuerdos tecnológicos del Reino Unido en su momento, estaba destinada a impulsar el negocio de software de HP. En lugar de ello, dio lugar a una serie de amargas y costosas batallas legales. HP ganó ampliamente un juicio civil contra Lynch y Hussain en Londres en 2022, aunque todavía no se han decidido los daños y perjuicios. La empresa busca 4.000 millones de dólares.

En ese juicio, Lynch estuvo en el estrado durante 20 días.

Lynch dijo que HP no sabía lo que estaba haciendo con Autonomy y que no comprendía su tecnología.