El mayor fabricante de productos electrónicos por contrato del mundo dijo el miércoles que había reanudado parte de la producción y las operaciones en sus campus de Shenzhen después de disponer que parte del personal viviera y trabajara en una burbuja, un acuerdo solicitado por el gobierno local en su lucha contra la propagación del COVID.

El sistema de "gestión de circuito cerrado" en sus campus allí durará hasta la medianoche del domingo, según un documento interno visto por Reuters y confirmado por dos personas familiarizadas con el asunto.

La empresa, llamada formalmente Hon Hai Precision Industry Co Ltd, ha visto un impacto "limitado" hasta ahora, pero a algunos directivos les preocupa que el acuerdo de burbuja se extienda más allá del domingo, ya que significa que el campus no está trabajando a plena producción, dijo una de las fuentes, que no está autorizada a hablar con los medios.

Foxconn remitió a Reuters a su declaración anterior, en la que la compañía dijo que se adhiere a las estrictas directrices de la industria y a las políticas emitidas por el gobierno de Shenzhen.

Sólo una pequeña parte de la producción de Foxconn para el iPhone de Apple en China tiene lugar en la ciudad meridional de Shenzhen, y la mayor parte se realiza en Zhengzhou, en la provincia central de Henan, dijeron las dos fuentes.