Hugo Boss podría retrasar sus objetivos clave de ventas y beneficios más allá de 2025 cuando presente sus resultados del segundo trimestre el jueves, ya que los inversores están atentos a las actualizaciones sobre el comercio y los planes de reducción de costes.
Las acciones de la empresa cayeron hasta un 10% en julio al recortar sus previsiones de ventas y beneficios para todo el año, citando el debilitamiento de la demanda mundial de consumo, especialmente en China y Gran Bretaña.
Advirtió en marzo de que su objetivo de alcanzar los 5.000 millones de euros (5.400 millones de dólares) de ingresos anuales en 2025 podría retrasarse, pero dijo que aún esperaba que su margen de beneficios antes de intereses e impuestos (EBIT) alcanzara al menos el 12% el próximo año.
"Aparte de los comentarios sobre las operaciones actuales, que serán seguidos de cerca por los inversores, no descartaríamos una actualización de los objetivos a medio plazo de Hugo Boss", dijo Felix Jonathan Dennl, analista de Metzler Capital Markets en Fráncfort.
Algunos analistas, incluido Dennl, esperan que Hugo Boss alcance su objetivo de ventas a medio plazo dos o tres años más tarde de lo previsto originalmente, y que alcance su objetivo de margen EBIT a medio plazo después de 2028.
"Si Hugo Boss no puede proporcionar más visibilidad, los objetivos de ingresos y EBIT deberían estar en duda", dijo Alexander Zienkowicz, analista senior de Mwb Research.
En una media de estimaciones actualizada por última vez antes de los resultados preliminares de la empresa a mediados de julio, los analistas habían previsto unas ventas de 4.650 millones de euros y un beneficio operativo de 519 millones para 2025, lo que corresponde a un margen EBIT del 11%.
Los recortes de costes también van a estar en el punto de mira, según Joerg Philipp Frey, analista de Warburg Research. Destacó el aumento del 21% del gasto en marketing de la empresa y el incremento de los gastos en tiendas físicas en el segundo trimestre con respecto al año anterior, en contraste con el descenso trimestral de sus ventas.
La marca de moda de alta gama ha emprendido una campaña de expansión, aumentando el gasto en marketing y abriendo 102 nuevos puntos de venta, entre tiendas propias, "shop-in-shops" y outlets, en 2023. Está intentando frenar una ralentización del crecimiento de las ventas que ha contribuido a que las acciones de la empresa hayan perdido casi la mitad de su valor este año.
"Para levantar el precio de las acciones, será importante que Hugo Boss demuestre una gestión eficaz de los problemas que tiene entre manos y un camino creíble hacia la recuperación", afirmó Zienkowicz.
El sector del lujo está lidiando con unas ventas más débiles y una presión sobre los márgenes, ya que los compradores, afectados por la inflación, se abstienen de derrochar en moda de diseño. La caída del sector inmobiliario y la inseguridad laboral en China han agravado el problema.
Los beneficios de las empresas de lujo este trimestre han demostrado las tensiones a las que está sometido el sector, ya que tanto LVMH como su rival Kering no han alcanzado las previsiones. (1 dólar = 0,9236 euros) (Reportaje de Linda Pasquini, información adicional de Ozan Ergenay; Edición de Matt Scuffham y Conor Humphries)