Los clientes ahora tienen que pagar 1,95 euros (2,13 dólares) si desean devolver piezas desde casa, y el coste se deducirá de su reembolso, dijo Zara en su página web española.

Sin embargo, los artículos comprados en línea pueden seguir devolviéndose gratuitamente en las tiendas físicas, añadió.

Como la pandemia del COVID-19 provocó un auge de las compras en línea, los clientes se acostumbraron a comprar artículos para probarlos en casa, ya que las devoluciones solían ser gratuitas, lo que elevó los costes para los minoristas.

Inditex, propietaria de Zara, también introducirá cargos por devolución en España para sus otras marcas, como Massimo Dutti y Pull&Bear.

A principios del año pasado, Zara introdujo cargos por algunas devoluciones en línea en Gran Bretaña y otros mercados principales, siguiendo medidas similares de rivales como Uniqlo o Next.

También existe un impacto medioambiental derivado de los vehículos de reparto implicados en el transporte de la ropa y la Comisión Europea quiere reducir el alto porcentaje de devoluciones de ropa comprada online.

Inditex espera que las ventas online superen el 30% de las ventas totales en 2024.

(1 dólar = 0,9163 euros)