El propietario de British Airways, International Consolidated Airlines Group (IAG), dijo el jueves que había acordado encargar 50 aviones Boeing 737 MAX para su entrega entre 2023 y 2027, en un voto de confianza en el atribulado fabricante de aviones estadounidense. El pedido de 25 737-8-200 y 25 737 MAX 10, que serán utilizados para vuelos de corta distancia por las aerolíneas propiedad de IAG, tiene un valor de 6.250 millones de euros a precio de lista, pero la empresa dijo que había negociado un descuento significativo, como es típico en la industria. Boeing emitió un comunicado informando a los inversores de la orden.

IAG, que es propietaria de la irlandesa Aer Lingus y de las españolas Iberia y Vueling, además de British Airways, también tiene otras 100 opciones de compra como parte del acuerdo, que está sujeto a la aprobación de los accionistas. "La incorporación de nuevos Boeing 737 es una parte importante de la renovación de la flota de corta distancia de IAG", dijo el director ejecutivo de IAG, Luis Gallego, en un comunicado.

El acuerdo se queda corto con respecto al compromiso no vinculante del ex director ejecutivo Willie Walsh de entregar 200 aviones 737 MAX en el Salón Aeronáutico de París de 2019, que supuso un salvavidas para Boeing cuando el modelo quedó en tierra tras dos accidentes mortales.Pero el pedido en firme del 737 MAX 10 por parte de un cliente importante es una señal importante para el mercado, en un momento en el que Boeing se enfrenta a una batalla cada vez más intensa para conseguir la certificación de la variante más grande del MAX antes de que entre en vigor una nueva norma de seguridad sobre alertas en la cabina a finales de año.

La salud financiera de Boeing depende de la reanudación de las entregas de los 787 Dreamliners y de la liquidación del inventario de MAX, según los ejecutivos y analistas de la compañía.

En febrero, Reuters informó de que era probable que IAG colocara una versión más ligera de su compromiso para 2019, que implicaba más de 50 aviones que los 200 originales. Steve Gunning, entonces director financiero de IAG, dijo a los analistas en noviembre que el grupo aéreo necesitaría unos cuantos aviones más de corto recorrido hacia 2024 o 2025 y sugirió que cualquier pedido incluiría el 737 MAX.