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Tres de los ETF están vinculados al mercado bursátil, mientras que los otros dos ofrecen exposición a bonos básicos y bonos municipales, respectivamente, según informó la firma en un comunicado de prensa.
"No se trata de lanzar un nuevo negocio, sino de ofrecer nuestras capacidades actuales a los inversores en un nuevo vehículo o paquete, el ETF", dijo a Reuters Michael Roberge, consejero delegado de MFS.
Los inversores han acumulado casi 1 billón de dólares en ETF este año, con un mercado bursátil estadounidense en auge y una proliferación de nuevos productos alimentando la afluencia récord.
La popularidad de los ETF ha impulsado a firmas tradicionales de gestión de activos como Fidelity e Invesco a lanzar sus propias ofertas en los últimos años para competir con gigantes del sector como State Street Global Advisors, Vanguard y BlackRock.
Aunque MFS fue una de las primeras en entrar en el negocio de los fondos de inversión, con el lanzamiento del fondo Massachusetts Investors Trust en 1924, ha tardado relativamente en entrar en el cada vez más competitivo terreno de los ETF, según los analistas.
"Todavía hay algunos recién llegados a este producto que han sido más lentos y cautelosos", dijo Bryan Armour, analista de ETF en Morningstar. "A medida que los ETF activos han explotado en tamaño, ha crecido el ímpetu para que dediquen recursos a los ETF".
Los ETF son más líquidos que los fondos de inversión, ya que pueden negociarse en bolsa a lo largo del día, y más eficientes desde el punto de vista fiscal. También suelen tener comisiones de gestión más bajas.
Los cinco ETF son MFS Active Value, MFS Active Growth, MFS Active International, MFS Active Core Plus Bond y MFS Active Intermediate Muni Bond. Reflejan las estrategias existentes de MFS, dijo Roberge.
Armour señaló el debut el martes del primer ETF de Harris Associates L.P., el Oakmark U.S. Large Cap ETF, gestionado por Bill Nygren, como otro ejemplo reciente del paso de un nombre de fondo de inversión de primer orden a los ETF.
