CHICAGO/A BORDO DEL AIR FORCE ONE, 1 jun (Reuters) - La Casa Blanca dijo el martes que la brasileña JBS SA informó al gobierno de Estados Unidos que un ataque de ransomware contra la compañía que interrumpió la producción de carne en América del Norte y Australia se originó en una organización criminal probablemente con sede en Rusia.

JBS es la empacadora de carne más grande del mundo y el incidente provocó el cierre de sus operaciones en Australia el lunes y detuvo la faena de ganado en sus plantas en varios estados estadounidenses.

El ciberataque se produce tras el producido el mes pasado en Colonial Pipeline, el oleoducto de combustible más grande de Estados Unidos, que paralizó el suministro durante varios días en el sureste del país.

La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo que Estados Unidos se ha puesto en contacto con el Gobierno de Rusia sobre el asunto y que el FBI está investigando.

"La Casa Blanca ha ofrecido asistencia a JBS y nuestro equipo en el Departamento de Agricultura ha hablado con su liderazgo varias veces en el último día", afirmó Jean-Pierre.

"JBS notificó a la administración que la demanda de rescate provenía de una organización criminal probablemente con sede en Rusia. La Casa Blanca se está involucrando directamente con el gobierno ruso en este asunto y transmite el mensaje de que los estados responsables no albergan a los criminales de ransomware", agregó Jean-Pierre.

Si continúan los problemas, los consumidores podrían ver precios de la carne más altos durante la temporada de parrilladas de verano en Estados Unidos y las exportaciones podrían verse interrumpidas en un momento de fuerte demanda de China.

JBS dijo que suspendió todos los sistemas afectados y notificó a las autoridades Agregó que sus servidores de respaldo no se vieron afectados.

"El domingo 30 de mayo, JBS USA determinó que era el objetivo de un ataque de ciberseguridad organizado, que afectó a algunos de los servidores que soportan sus sistemas de TI de América del Norte y Australia", dijo la compañía en un comunicado el lunes.

"La resolución del incidente llevará tiempo, lo que puede retrasar ciertas transacciones con clientes y proveedores", agregó la empresa.

(Reporte de Caroline Stauffer, Tom Polansek, Mark Weinraub en Chicago, Reporte adicional de Ana Mano en Sao Paulo, Editado en Español por Manuel Farías)