WASHINGTON, 5 abr (Reuters) - Un grupo de la industria automovilística estadounidense instó el lunes al Gobierno a que le ayude mientras advirtió que la escasez mundial de semiconductores podría dar lugar a que se construyan 1,28 millones de vehículos menos este año y perturbar la producción durante otros seis meses.

El Departamento de Comercio de EEUU debería dedicar parte de los fondos de una propuesta de ley para ampliar la producción doméstica de semiconductores a las necesidades del sector automovilístico, dijo la Alianza para la Innovación Automovilística en sus respuestas escritas a una revisión iniciada por el Gobierno.

El presidente de EEUU, Joe Biden, ordenó en febrero la adopción de varias medidas por parte de las agencias federales para hacer frente a la crisis de los semiconductores y también está buscando 37.000 millones de dólares de financiación para una legislación que permita sobrealimentar la fabricación en Estados Unidos.

Parte de la financiación debería "utilizarse para construir nuevas capacidades que apoyen a la industria del automóvil y mitiguen los riesgos para la cadena de suministro de la automoción evidenciados por la actual escasez de semiconductores", escribió el jefe del grupo, John Bozzella.

La entidad dijo que el Gobierno de EEUU podría especificar "un porcentaje particular -que se basa razonablemente en las necesidades proyectadas de la industria automotriz- que se asigne a las instalaciones que apoyarán la producción de semiconductores de grado automotriz de alguna manera".

El grupo representa a casi todos los grandes fabricantes de automóviles con fábricas en Estados Unidos, entre ellos General Motors Co, Ford Motor Co, Volkswagen AG, Toyota Motor Corp y Hyundai Motor Co.

Los fabricantes de automóviles se han visto especialmente afectados por la escasez mundial de semiconductores después de que muchos de ellos cancelaran sus pedidos cuando las fábricas de automóviles estuvieron paradas durante la pandemia de coronavirus.

Cuando se dispusieron a reanudar la producción, se encontraron con que los fabricantes de semiconductores estaban ocupados atendiendo los pedidos del sector de la electrónica de consumo, que ha visto crecer la demanda de dispositivos de alta gama, tanto para el trabajo como para el ocio, a medida que la gente pasa más tiempo en casa.

La mayoría de los fabricantes de automóviles se han visto afectados por la escasez. En anuncios recientes, Ford dijo la semana pasada que reduciría la producción en siete plantas de montaje norteamericanas, mientras que Kia Motors dijo que estaba recortando dos días de producción en Georgia.

(Información de David Shepardson; editado por Edwina Gibbs, traducido por Michael Susin en la redacción de Gdansk)