La aerolínea alemana busca una participación del 41% en la rival italiana de propiedad estatal por 325 millones de euros (351,4 millones de dólares) como parte de una ampliación de capital.

La Comisión Europea abrió una investigación a gran escala sobre el acuerdo en enero ante la preocupación de que la adquisición pudiera reducir la competencia en los servicios de transporte aéreo de pasajeros en varias rutas de corta y larga distancia.

El organismo de defensa de la competencia de la UE también examinará si ITA, Lufthansa y sus socios de empresas conjuntas United Airlines y Air Canada deben ser tratadas como una única entidad tras la fusión.

Lufthansa espera recibir a mediados de marzo un pliego de cargos de la Comisión en el que se expongan con más detalle dichas preocupaciones, según la persona en cuestión.

Los posibles remedios podrían hacerse eco de los del acuerdo entre Korean Air y Asiana, que fue autorizado por la Comisión sólo después de que renunciasen a franjas horarias, derechos de tráfico y aviones para permitir que un rival operase en cuatro rutas que se solapaban, dijo la persona.

Lufthansa había ofrecido soluciones durante la revisión preliminar del acuerdo por parte del organismo de control de la UE, pero éstas fueron rechazadas después de que no lograran calmar las preocupaciones reguladoras.

La Comisión, que debe pronunciarse sobre el acuerdo antes del 6 de junio, declinó hacer comentarios.

(1 dólar = 0,9249 euros)